Era muy difícil, en Letonia sabían que sacar algo positivo del Algarve, en la fiesta de la campeona de Europa que jugaba el último partido de un año histórico. Sin embargo, el combinado báltico resistió muy bien en defensa hasta el ecuador de la segunda parte, sin conceder demasiadas ocasiones de gol a los peligrosos atacantes portugueses.

Tras un claro penalti sobre Nani, Cristiano Ronaldo adelantó a los suyos a la media hora de juego. Sin embargo, aunque con ese gol parecía que los letones se vendrían abajo, nada de eso pasó. Dirigidos por Marians Pahars, los noreuropeos resistieron el 1-0 y trataron de salir a la contra, aunque les costaba sobremanera traspasar el medio campo. Cuando consiguieron lo más difícil, el empate de Zjuzins tras el primer tiro a puerta, no pudieron resistir atrás y cayeron derrotados gracias en gran parte a los centros laterales que no supieron defender, y a un genial Quaresma, que salió de refresco y marcó la diferencia.

Tras el encuentro, y con un 4-1 encajado ante Portugal, Marians Pahars se refirió al resultado del partido. "La diferencia entre los dos equipos se ha visto reflejada en el marcador. Desafortunadamente, Portugal ha conseguido un margen de tres goles", lamentó.

Por otra parte, habló sobre el jugador que, a su juicio cambió el partido, Ricardo Quaresma. "Hasta la entrada de Quaresma, se demostró que no iba a ser fácil para Portugal. Controlaron la pelota, pero no pudieron crear peligro. Quaresma vino y todo cambió. Un jugador como él puede hacer una gran diferencia", dijo.

Por último, aseguró que no podía hacer un análisis del juego en ese momento, sino hablar de los sentimientos que le había producido el partido: "Puedo decir lo que siento, pero no puedo hacer un análisis del juego. Esto podré hacerlo en unos pocos días. Lo que siento es que la diferencia entre los dos equipos fue evidente en el resultado".