En sus más de cien años de historia, el club txuri-urdin participó por primera vez en competición europea un 18 de septiembre de 1974. Tras acabar en la temporada 1973/74 en cuarta posición, los realistas tuvieron el honor de clasificarse para la Copa de la UEFA. Por aquel entonces solo el campeón de Liga tenía el derecho a participar en la Copa de Europa.

En la jornada 31 -había un total de 34- los guipuzcoanos se aferraron con fuerza a la cuarta plaza y ya no la soltaron. Si bien es cierto, que no fue hasta la última jornada cuando se obtuvo de manera matemática el pasaporte europeo, tras vencer al Castellón. El Athletic, el rival con el que pujaba por la posición, no pasó del empate. La Real acabó con 39 puntos, los bilbaínos, con 37.

Los artífices de aquel éxito reconocieron que al inicio de la campaña no tenían en mente la clasificación europea. Fue algo imprevisto, que no estaba planificado, pero que se consiguió gracias al gran grupo humano que se había formado en el vestuario. La Real se ganó el derecho de viajar por méritos propios, tras realizar una notable segunda parte de campeonato.

Siete años después del ascenso de Puertollano, algunos de aquellos héroes, como Gorriti, Martínez, Urreisti y Boronat pudieron disfrutar de la primera eliminatoria continental. Otros como Kortabarria, Diego e Idigoras, empezaban a aparecer en la primera plantilla. Comenzaba a forjarse la Real bicampeona de Liga, la que acudiría con asiduidad a competiciones europeas.

Demasiado rival para los donostiarras

Aquel primer choque europeo contra el Banik Ostrava checoslovaco tuvo más importancia por el hecho histórico, que en el apartado deportivo en sí. Los donostiarras cayeron derrotados en la ida disputada en Atotxa, por 0-1. En la vuelta en Ostrava, los blanquiazules fueron goleados por 4-0, por lo que los guipuzcoanos no pudieron estrenar su cuenta goleadora en su estreno en la competición. Todavía quedaba mucho por aprender en enfrentamientos contra rivales extranjeros.

Para el recuerdo quedará el primer once europeo en la historia de la Real Sociedad que lo conformaron: Urrutikoetxea, Gorriti, Murillo, Gaztelu, Martínez, Kortabarria, Araquistain, Diego, Ansola, Urreisti y Boronat. Además también disputaron minutos durante el encuentro, Uranga y Amas. En la vuelta, la Real salió con Artola, Gorriti, Uranga, Gaztelu, Martínez, Kortabarria, Urreisti, Diego, Idígoras, Amas y Boronat. También jugaron, Araquistain y Corcuera. Dirigidos en todo momento por técnico Elizondo.

Fue la ratificación definitiva de que la Real había vuelto a la máxima categoría del fútbol español para no marcharse. Lo del equipo ascensor ya era agua pasada, y los realistas lo volvieron a dejar claro el mismo año en Liga, tras volver a clasificarse para la Uefa. En esta segunda participación, los vascos tuvieron mejor suerte y lograron pasar una ronda. Pero esa ya es otra historia.