El torneo del KO arrancó ayer para un buen número de conjuntos de segunda y segunda B a lo largo y ancho de la Península Ibérica. Una primera eliminatoria, a partido único, de la que muchos equipos ya han quedado apeados y se despiden de esta competición y que otros tantos la superaron y avanzan en la misma. Así fue para Amorebieta y Barakaldo respectivamente, en un choque que se disputó en el estadio fabril de Lasesarre y que, como suele suceder en este torneo, se mantuvo emocionante hasta el pitido final.

Sin embargo, el arranque del encuentro no hacía presagiar que la tensión y la incertidumbre se fuese a mantener durante los 90 minutos ya que la escuadra gualdinegra salió avasallando a su rival y, cuando aún no se había cumplido un minuto de juego, ya gozó de una clara ocasión en un mano a mano protagonizado por Goti que no supo definir ante la meta defendida por Villanueva.

Estos primeros compases eran, por tanto, de claro color local, dominio que se certificó en forma de gol en el minuto 12, cuando de nuevo Goti remachó a placer un pase desde la izquierda de Coke tras una buena internada de éste. Los de Zurimendi se ponían por delante en el marcador ante un Amorebieta que parecía que todavía no había saltado al césped de Lasesarre.

A partir de ese momento, el encuentro se tiñó gris, sin grandes aproximaciones a las áreas, a excepción de jugadas a balón parado que tampoco ponían en excesivos aprietos a los arqueros de ambos conjuntos. El Barakaldo, con cambios en su once respecto a los dos primeros partidos de liga, se mostraba bien plantado en el campo y no veía peligrar la ventaja que ya había adquirido. De hecho, en el minuto 39 estuvo a punto de ampliar su renta gracias a un disparo desde la frontal de Joseba Arriaga que se marchó lamiendo el palo de la meta azul. Justo después de dicha acción, Arriaga se retiraba lesionado del terreno de juego dejando su lugar a Jorge.

El Barakaldo busca la sentencia

De esta manera se llegó al descanso, momento en el que en las tribunas del coliseo barakaldés brillaban gracias al reflejo de la plata del papel que envolvía los bocadillos de la hinchada y momento que se aprovechó para regar el verde manto de Lasesarre para hacer más rápida la circulación de la bola en el segundo periodo, segunda mitad que se inició de la misma forma que arrancó la primera, esto es, con un Barakaldo que saltó dispuesto a cerrar el partido con un segundo gol.

Así, un precioso eslálom por la banda izquierda de Jorge no encontraba rematador en el primer minuto. Poco después, de nuevo Jorge, dispara desde la frontal, tras una buena jugada de Goti, lanzamiento que Villanueva despeja a córner. Y más llegadas y aproximaciones que no acababan de convertirse en el gol de la sentencia, hecho que empezaba a inquietar a la parroquia gualdinegra.

Los locales se quedan con 10

Asimismo, el encuentro se empezaba a tornar bronco, con acciones del conjunto azul que pudieron haberle costado el quedarse con diez efectivos, sobre todo en una dura entrada de Bordas con los pies por delante a Joseba Ariño en el minuto 53 que era de amarilla clarísima pero que el colegiado del encuentro, señor César Soto, le perdonó ya que, minutos antes, ya le había enseñado la primera de ellas. Sin embargo, en el minuto 77, no actuó de la misma forma, mandando a los vestuarios a Jon Ander Garrido, que se había incorporado en el descanso, tras enseñarle dos cartulinas amarillas.

Con diez sobre el campo, al Barakaldo le tocaba sufrir y defender como gato panza arriba el gol que desde el inicio del encuentro campeaba en el electrónico de Lasesarre. Iñaki Léniz, míster visitante, por su parte, introdujo mayor mordiente ofensiva con las incorporaciones de Arman y Garmendia en busca del tanto del empate que provocase la prórroga, un tiempo de prolongación que hubiese sido letal para los intereses gualdinegros dado el desgaste físico que llevaban encima.

Finalmente, ésto no sucedió pese a que, ciertamente, el Amorebieta intesificó la presión y se adueño del esférico pero sin llegar a generar claras ocasiones en la portería fabril. La opción más clara la tuvo en el minuto 79, en una jugada por banda derecha que fue sacada por un inconmensurable Alberto Delgado.

De ahí al final del partido, la grada acabó pidiendo la hora y el Barakaldo logró mantener su arco a cero lo que, a la postre, supuso la victoria y, por ende, el pase a la segunda eliminatoria de la Copa del Rey, la cual disputará el próximo miércoles a las 20:30 en el campo de La Murta, cancha del Olipic de Xátiva valenciano.

Agradecido por el esfuerzo de sus pupilos

En sala de prensa, el míster gualdinegro, Iñaki Zurimendi se mostraba contento por el resultado y por el esfuerzo mostrado por sus jugadores. El de Alonsotegi ha considerado que, a pesar de ello, quedan muchos aspectos por pulir, sobre todo a nivel defensivo, pero quiso agradecer y felicitar a sus pupilos por el trabajo y el corazón que le han puesto para sacar la eliminatoria adelante. Respecto a la lesión de Arriaga, Zurimendo ha indicado que se trata de una "roturilla muscular" que espera no sea grave. Y de cara a la segunda ronda contra el Xátiva, el técnico fabril ha preferido señalar la siguiente cita liguera de los suyos (el próximo domingo a las 18:00, en Lasesarre, frente al Puerta Bonita) y, una vez pase ésta, ya se volverá a hablar de la Copa.

Falta de pegada

Por su parte, Iñaki Léniz, entrenador del Amorebieta, ha calificado el encuentro de "igualado" considerando que el mayor déficit de los suyos es la falta de pegada en los últimos metros, factor que, a su juicio, se solventará cuando lleguen las buenas rachas. A partir de ahora, el conjunto azul se centrará exclusivamente en la liga del grupo II de la Segunda B, empezando por el próximo encuentro que les llevará este fin de semana a Tafalla, para medirse al Peña Sport.

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