En Zorrilla, el Celta se siente como en casa

De nuevo vuelven las estadísticas a una previa del Real Valladolid para avisar al conjunto castellano de que si quieren enderezar el rumbo tendrán que vencer no solo al rival contrario, sino también a los números históricos que pesan como una losa invisible. Es decir, no pesan nada en sentido literal, pues cada partido es diferente al anterior, pero importunan a la hora de echar la vista atrás y comparar a dos equipos entre los que ha crecido la rivalidad en los últimos años tras los duelos en la Liga Adelante en los que ambos peleaban en lo alto de la tabla.

Si al equipo de Juan Ignacio Martínez ya le cuesta lo indecible derrotar rivales en esta temporada, para más inri los números y el pasado se están confabulando en las últimas fechas para sumarle un ingrediente que apela más a la historia y al orgullo que a la moral puntual de cada partido. Tal y como ocurriera contra Osasuna en el partido que llevó a los rojillos al Estadio Nuevo José Zorrilla hace menos de un mes y en el cual los de Pamplona se presentaban en Valladolid después de once años sin conocer la derrota, el Celta llega a este encuentro con una racha muy favorable.

Lejos de analizar el juego del equipo de Martínez y sus posibilidades -o imposibilidades- de derrotar a los rivales, lo que es harina de otro costal, un estudio pormenorizado de los resultados históricos entre Valladolid y Celta de Vigo deja a los gallegos como vencedores morales de los combates singulares entre ambos.

La mejor plaza para el Celta

A lo largo de los años Valladolid y Celta de Vigo se han enfrentado numerosas veces desde que lo hicieran por primera vez en la máxima categoría del fútbol español en la temporada 1948-49. Un total de 54 partidos son los que han disputado ambos conjuntos. En este poco más de medio centenar de encuentros el Celta le tiene ganada la partida al Real Valladolid hasta la fecha. Los vigueses han vencido en 25 ocasiones por 13 de los vallisoletanos y 16 empates entre ambos. Estas estadísticas se ven refrendadas por los goles que han conseguido marcar los dos equipos: 61 goles a favor del Real Valladolid y 80 para el Celta de Vigo. 19 goles de diferencia que son indicativo de la superioridad celeste.

Estos números globales inclinan la balanza para los intereses celtarras, pero si se decide mirar más de cerca a los resultados entre el Celta y el equipo de la capital del Pisuerga en el feudo vallisoletano la diferencia entre ambos se acrecenta. Y es que el equipo que ahora dirige Luis Enrique llega al José Zorrilla con una racha envidiable y unos números que sirven como apoyo moral a la hora de buscar otra victoria a sumar en su casillero.

De los 27 encuentros que han podido disfrutar los aficionados del Valladolid en las gradas de Zorrilla el Celta ha conseguido llevarse los tres puntos a Vigo en 11 ocasiones. Un 41% de victorias para los celestes que convierte a esta salida a tierras castellanas en la preferida para los intereses vigueses, pues es el lugar donde más victorias ha domicilio han conseguido en su historia en Primera División. Esto deja al Valladolid con tan solo el 37% de victorias contra el Celta de Vigo en su campo; diez partidos que se antojan insuficientes ante la exigencia de hacer del campo local un feudo donde los equipos tengan complicado sacar puntos.

El Valladolid no encuentra la luz

Puede que la bombilla esté fundida, que la instalación eléctrica no esté bien realizada o simplemente que no se encuentre el interruptor que permita al Valladolid ver con claridad en los partidos contra los vigueses. Sobre todo en los últimos catorce años en los que el Valladolid no conoce la victoria ante el Celta en Primera División. Los gallegos tienen esa formula secreta que les permite mostrarse netamente superiores ante los albivioletas y no dar opción a que estos puedan mostrar una reacción positiva y revertir una situación que empieza a ser tan oscura como una noche cerrada en el invierno de Valladolid.

Son doce los partidos que lleva el Real Valladolid sin conseguir vencer al Celta de Vigo en la Liga BBVA en los últimos casi quince años. La última victoria pucelana en Primera División data del 14 de febrero de 1999, en la cual el Valladolid se impuso por 2 a 1 con goles de Caminero y Alberto, que deshizo el empate que puso Revivo en el minuto 60. En estos poco más de diez partidos el Real Valladolid ha perdido nueve partidos y empatado tan solo tres. Tres puntos de los 36 que se han puesto en juego dejan claro que el Valladolid tiene en el Celta a un grano muy molesto que pica más de lo necesario y no se consigue eliminar con ningún tratamiento.

Tabla de los últimos doce enfrentamientos entre Valladolid y Celta de Vigo en Primera División

Si bien esta racha no es una muestra acertada de todos los últimos enfrentamientos entre ambos por contabilizarse solo los que han enfrentado a ambos en Primera División. Este periodo de victorias celestes se ve frenado si se tienen en cuenta los partidos que han disputado en otras competiciones; tanto en la Copa del Rey como en la Liga Adelante. Es en esta división de plata en la que el Real Valladolid ha conseguido sus últimas victorias contra el Celta, ya que en la temporada 2010-11 los blanquivioletas consiguieron ganar en los dos enfrentamientos de competición doméstica.

Si a esos datos históricos se suman las tendencias que llevan ambos conjuntos en esta temporada 2013-14, el equipo de Juan Ignacio Martínez tendrá mucho que remar si quiere no ahogarse en el próximo partido contra el Celta. El Valladolid en los últimos cinco partidos que ha jugado en su feudo ha empatado contra el Málaga, el Sevilla, la Real Sociedad y el Rayo de Jémez; y ha perdido contra el Osasuna por 0-1. En estos encuentros ha marcado un total de seis goles y ha recibido otros siete. Por su parte, el Celta en los cinco últimos partidos fuera de Balaídos ha conseguido dos victorias y tres derrotas; con 10 goles a favor y 8 en contra, lo que convierte al equipo de Luis Enrique en uno de los equipos más goleadores de la Liga BBVA fuera de casa.

Todos estos números son los que intentará superar el Real Valladolid en lunes a las 22:00 horas en el césped de Zorrilla, delante de unas gradas en las que no se espera gran ambiente. La decisión de la LFP de poner un partido en Valladolid a las diez de la noche en pleno invierno no parece una de las mejores decisiones de sus vidas, pero seguro que los aficionados al fútbol ya están acostumbrados a que quién manda en estas cosas suela pensar de manera contraria a sus intereses.

Fotos: Marca y La Información.