El Cádiz CF ya está en la segunda ronda de la Copa del Rey tras pasar el fácil escollo que supuso el CD San Roque de Lepe. El Club Deportivo Lealtad será el próximo contrincante en la competición, el próximo miercoles en el Estadio Ramón de Carranza. 

Desigualdad desde el comienzo

Duelo desigualado el vivido esta noche en el Ciudad de Lepe entre un equipo, el aurinegro, confeccionado para luchar por la permanencia en Segunda División B y otro, el gaditano, fabricado con la única premisa de ascender a la Liga Adelante.

La superioridad del equipo visitante no se hizo patente hasta la mitad del primer periodo -hasta entonces lo más llamativo fueron un par de saques de esquina por parte de los amarillos y un túnel del delantero sanroquista Son a Kike- cuando Luisma se vio obligado a realizar un paradón tras el tiro del exaurinegro Juan Villar. El conjunto visitante comenzó a estar cómodo en el terreno de juego, donde era dueño de la posesión gracias a la gran labor de Garrido y Juanma. 

A la media hora de juego, un despeje del defensa local Juanje rebotó en Kike López cambiando la dirección del balón y sacando el "uy" en la afición cadista desplazada hacia la localidad onubense. La escuadra amarilla empezaba a acosar la portería de Luisma, que se erigía como el héroe aurinegro, tras salvar los muebles locales. Pero el cántaro se rompió en el minuto 43 de la mano de un conocido de la afición lepera, Juan Villar. El jugador criado en el Recreativo de Huelva batió al cancerbero lepero para pedir perdón después a la parroquia sanroquista. Un minuto después, pudo agravar el daño, pero en esta ocasión marró el tiro. Con este panorama se llegó al descanso.

Sentencia cadista

La segunda mitad comenzó con el primer disparo local en lo que se llevaba de partido. El ariete Son puso en aprietos a Richy Alonso tras un centro-chut. La primera llegada local sólo fue un espejismo, ya que el Cádiz seguía siendo el que llevaba peligro al área rival. En una falta mal sacada por el San Roque de Lepe, el conjunto gaditano se plantó ante Luisma con sólo un par de combinaciones y la vaselina de Kike López no encontró portería. A los veinte minutos del segundo acto, un gran Juan Villar volvió a perdonar la vida a su exequipo antes de que el combinado de Calderón sentenciara el choque.

Eso sucedió en el 68´. El rechace de una falta lanzada por Juanje le llega a Mustafá en la frontal del área. El extremo aurinegro tenía las opciones de chutar o volver a colgar el balón en el área amarilla, pero para desesperación de los aficionados leperos, eligió la individualidad e intentó driblar entre dos oponentes, regalando el esférico y echando por la borda la posibilidad de empatar el partido. El contragolpe dirigido por Kike lo aprovechó de forma excelente Migue García, que con un toque sutil sobrepasó a Luisma por arriba. Ese segundo mazazo acabó con las esperanzas aurinegras, el equipo local desapareció del encuentro. 

Mas tarde, Juan Villar, por enésima vez, erró una ocasión creada por Fran Machado. Minutos después fue sustituido y despedido por una afición agradecida con el jugador que vistiera su camiseta en el pasado. A falta de cinco minutos para el pitido final, un centro de Migue García lo remató el defensa Germán hacia su portería y forzó a Luisma a la estirada. Tres minutos después llegaría el tercero. Un genial pase de Garrido desnudó a un descolocado San Roque y dejó solo a Tomás, que remató cruzado batiéndo de nuevo a un desesperado portero local.

Victoria merecida del Cádiz ante un San Roque de Lepe que sólo conoce la derrota en lo que va de curso. Quizás sea buena noticia la eliminación copera para el equipo de Ceballos, que se podrá centrar el objetivo primordial de la temporada que no es otro que la permanencia en la división de bronce del fútbol español.