No levanta cabeza el Eibar. Los guipuzcoanos vuelven a sumar una derrota que sabe agria. La SD Eibar recibió al Rayo Vallecano con la mala racha sentenciada y con el recuerdo de la remontada en el partido de ida. Ya sabían lo que era ganar a los de Paco Jémez y querían volver a repetirlo.

El cuadro vasco empezó fuerte y a punto estuvo de adelantarse en el marcador. Ander Capa fue el protagonista en las dos primeras acciones de peligro. El extremo vio cómo un defensor evitaba su gol en el minuto 5' y más tarde, en el minuto 25' estrelló el balón en el travesaño después de una gran carrera por la banda.

El premio a la constancia

Después de unos buenos primeros minutos para los locales, vieron su recompensa en el 35'. Piovaccari aprovechó un gran pase entre líneas, fue arrollado por el meta Cristian Álvarez. El colegiado gallego Ignacio Iglesias Villanueva señaló penalti y el encargado de transformar la pena máxima fue el capitán Mikel Arruabarrena, que veía como ascendía el 1-0 en el marcador.

Fulminados por un rayo

La comodidad que había conseguido el Eibar duró un abrir y cerrar de ojos, precisamente 2 minutos, que fue lo que tardaron los madrileños en dar la vuelta al marcador. Dos cabezazos, primero Bueno en el 40' tras un gran centro de Tito con la bota izquierda, y más tarde el angoleño Manucho en el 42' definiendo a la perfección un córner, (1-2).

El Eiba se fue cabizbajo al vestuario, con la sensación de que el partido se le escapaba entre las manos.

En la reanudación los vallecanos salieron con más fuera, de hecho los locales no tuvieron ocasiones de peligro hasta el minuto 80'. El primer acercamiento por parte de los madrileños llegó en una falta lateral que Ba mandó al fondo de la mallas. Sin embargo el asistente anuló el tanto por un fuera de juego más que apretado.

Los hombres de Garitano presionaban pero los visitantes tocaban el balón con bastante sentido. De hecho, fueron muy superiores en la segunda mitad del partido y tuvieron varias ocasiones para sentenciar el partido. La más clara la firmó de nuevo Manucho, muy activo en Ipurúa. El angoleño remató en el área chica un centro desde la banda y Jaime tuvo la fortuna de que el esférico le golpeara en la cara.

Tirando de orgullo

Los pupilos de Garitano echaron el resto en los últimos 10 minutos de encuentro, pero no fue suficiente para sacar algo de la jornada. Se quedaron con la miel en los labios, ya que disfrutaron de las mejores ocasiones del partido para perforar la meta rival. 

Primero Manu del Moral no pudo conectar del todo bien un balón dentro del área y lo estrelló en el lateral de la red. Más tarde la más clara del partido, un centro de Javi Lara desde el banderín de córner encontró la testa de Raúl Navas -más tarde sería expulsado por doble amarilla- que batió por completo al portero, sin embargo Tito salvó los muebles y sacó el balón en línea de gol.

El marcador no se movió y los eibarreses volvieron a sumar otra derrota. Tres puntos perdidos que acentúan la caída libre del conjunto armero.