Después del partido ante el Espanyol, Paco Jémez dio dos días libres a sus jugadores. Algunos de ellos se quedaron en Barcelona, otros volvieron a Madrid... La mayoría de ellos disfrutaron de sus familias y cargaron pilas de cara a la fase final de la temporada.

El miércoles regresaron al trabajo con una sesión matinal con mucho balón, como es costumbre en el Rayo Vallecano. Hubo ejercicios de posesión y también de finalización de jugadas, algo que está condenando al equipo de Paco Jémez en algunos partidos. Todo ello, como siempre, después de una breve sesión de trabajo físico.

Nombres propios

Entrenamiento plagado de buenas noticias. Por un lado, Antonio Amaya ya ha pisado césped y ha trabajado con el recuperador del equipo Víctor Paredes. Sorprende que empiece a acortar plazos tan pronto y, a pesar de lo que pareciera en un principio, a lo mejor Paco Jémez sí podrá contar con él en alguno de los tres partidos que quedan. Abdoulaye Ba ha trabajado en el gimnasio y espera avanzar en sus molestias con el paso de los días para estar al 100% contra el Getafe.

La mejor buena nueva es el regreso de Leo Baptistao y el guardameta Cristian Álvarez con el grupo. El delantero puede ser de mucha ayuda para que Manucho y Miku no bajen el ritmo en este último tramo y el guardameta argentino para que Toño siga acumulando buenas actuaciones al ver más comprometida que antes su titularidad.

Puerta abierta

Finalmente todos los entrenamientos de la semana serán a puerta abierta para los aficionados, incluido el del viernes a las 18:00 en el Estadio de Vallecas, que en un principio iba a ser a puerta cerrada. El resto de días, sesión a las 10:30 en la Ciudad Deportiva Fundación Rayo Vallecano.