En la mañana del domingo, el Getafe B recibía al colista del grupo, el Portugalete. Las cosas se torcían tempranamente para el filial y el marcador terminó mostrando un 0-2 en favor del conjunto vasco al final del encuentro. El filial azulón salió bastante enchufado y queriendo tener el partido de su lado desde los primeros minutos y así lo describió Carbonell: "Hemos empezado muy bien, llevábamos el dominio del partido, pero en una acción nos han metido el gol". Los pupilos de Navarro trataron de enmendar el partido, pero como ha declarado el capitán, el Portugalete se echó atrás y así continuó el resto del partido.

El primer gol llegaba a raíz de un error defensivo, el delantero rival le ganaba la posición a la defensa azulona y así anotaba el primero. "Es una falta lateral, que estamos intentando corregirlas, porque no puede ser que nos metan tantos goles así", exponía el jugador azulón. El central aclaraba que eran situaciones de partido en las que estaban trabajando para tratar de enmendarlas ya de cara a la próxima jornada.

A este Getafe B le está faltando llegada, profundidad. "El balón y el dominio del partido es suyo, pero no consiguen hacer gol. "Hemos empezado a tocar y tocar mucho por el centro, no hemos tenido profundidad por banda, que ha sido, yo creo, lo que nos ha faltado un poco", explicaba Carbonell.

A falta de pocos minutos para el final del encuentro, la pareja de Carbonell en el centro de la zaga, Tomas Rukas, ha visto la segunda tarjeta amarilla y ha sido expulsado del terreno de juego. El capitán azulón ha declarado que no podía decir si era falta o no puesto que se encontraba lejos de donde había sucedido la acción, aunque reconoce que le han dicho que era el delantero rival quien se tiraba, expresando, de nuevo, que él no lo había visto bien.

La próxima jornada, el filial azulón viajará al País Vasco para enfrentarse al Leioa. Alberto Carbonell manifestaba que intentarían sacar el mejor resultado allí y que aún queda mucha temporada por delante, que no hay que preocuparse.