Dani García regresaba al once titular en El Madrigal después de cumplir un partido de sanción por acumulación de tarjetas ante el Getafe. El centrocampista de Zumarraga no pudo celebrar su reciente renovación hasta 2018 con una victoria, pese a que la Sociedad Deportiva Eibar estuvo por delante en el marcador durante una hora de juego. Los armeros controlaron el encuentro en la segunda mitad hasta que Prieto Iglesias decidió enseñar la segunda cartulina amarilla a Keko por golpear el balón con la mano.

El capitán del Eibar se mostró muy crítico al término del partido con la decisión adoptada por el colegiado navarro. "Igual deben de cambiar las normas para que el fútbol sea un deporte más fácil. Quedarte con un jugador menos por una acción en la que no había ningún peligro y el balón le ha dado en la mano después de rebotar en la pierna... Algo tiene que cambiar. Esto no puede seguir así", señaló.

El de Zumarraga destacó el buen papel desempañado por su equipo y lamentó el tanto de Jaume Costa en los últimos minutos del encuentro: "Ha sido un partido bonito y creo que la gente se ha divertido. Hemos estado muy bien y es una pena el gol que hemos recibido porque han tenido un poco de suerte, aunque es verdad que estaban apretando".

El futbolista guipuzcoano asumió la responsabilidad de lanzar un penalti señalado sobre Borja Bastón en el tramo final de la primera parte, pero su disparo fue detenido por Aréola. A pesar del error, Dani no tendrá problemas en volver a lanzarlo si se presenta la ocasión. "Siempre nos solemos quedar unos cuantos a entrenar los lanzamientos de penalti y hoy me he visto con confianza para tirarlo. Lo he tirado mal y ha sido más fallo mío que mérito del portero del Villarreal. Si hay otra oportunidad y me dejan, volveré a tirarlo", bromeaba el jugador del Eibar.

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