"Te garantiza que si le pasas el balón, no te devolvera un melón", aseguró Jabo Irureta sobre Bittor Alkiza. Precisión en el pase, técnica, protección de balón y un disparo potente eran algunas de sus virtudes, lo que llevó al donostiarra a debutar con el primer equipo con 20 años de la mano de Toshack,  en un encuentro el Camp Nou ante el FC Barcelona, en la temporada 91-92.

En esa campaña, tras su debut, participó en otros 25 partidos logrando tres goles y un buen rendimiento que le dio continuidad para ser titular el siguiente año. Irrumpió con fuerza en el primer equipo, lo que le hizo ganarse el puesto de titular durante los dos años en los que demostró la calidad que atesoraba. Gracias a sus actuaciones, en la temporada 93-94 despertó las pasiones de media España, sonando como refuerzo para equipos como el Real Madrid o el FC Barcelona. 

Recalar en el eterno rival

A pesar de sonar para equipos como el Real Madrid o el FC Barcelona, Alkiza se marchó al Athletic

Finalmente, y a pesar de sonar para grandes equipos, Bittor fue fichado por el Athletic descontento con la organización del club realista. Su marcha fue una gran decepción para los aficionados realistas, aunque los seguidores no la tomaron con el jugador sino con el entrenador, Toshack, y la directiva, que además de permitir que el eterno rival se llevase a uno de los jugadores más prometedores de la cantera txuriurdin, aceptaron una oferta inferior a la de la cláusula de rescisión del futbolista.

Alkiza, en una disputa del balón con Raúl | Imagen: Getty
Alkiza, en una disputa del balón con Raúl | Imagen: Getty

En esta época en Bilbao, Alkiza brilló con la camiseta rojiblanca hasta el punto de poder llevar a los vizcaínos a jugar la liga de campeones. Además, sus actuaciones le llevaron al entonces seleccionador Camacho a incluirlo en las convocatorias de la selección española. Finalmente, en 2003, el donostiarra decidió marcharse del club donde había disputado más de 300 partidos en nueve temporadas para ayudar a la Real Sociedad en su nueva aventura en la Champions League.

Dos años de despedida

En 2003 Alkiza volvió a la Real Sociedad para retirarse

Alkiza volvió al conjunto que le vio nacer para, además de jugar la máxima competición europea con la elástica txuriurdin, retirarse con los colores de la camiseta con la que debutó. En la temporada 2003-2004 formó una gran pareja con Aranburu, y lograron junto a sus compañeros pasar la fase de grupos de la Champions y clasificarse para octavos, donde fueron eliminados por el Olympique de Lyon. En Liga, los realistas quedaron en el decimoquinto puesto.

En la campaña siguiente Alkiza no pudo disputar más de diez partidos, marchándose lesionado en el partido ante el Villarreal el 30 de enero de 2005. Una afección en un dedo del pie le obligó a pasar por el quirófano ese mismo año, por lo que el donostiarra se vio forzado a tener que dejar el fútbol, ya que dijo adiós a la temporada en la que acababa contrato. 

Vuelta como técnico

Tras unos años alejado del deporte de su vida, Alkiza fue elegido por la Real Sociedad como director de fútbol base del club. En Zubieta coincidió con Jagoba Arrasate, quien le dio la oportunidad de sentarse en un banquillo en el año 2013 como tercer entrenador. Esta amistad con Arrasate le ha dado la oportunidad de acompañarle al ex-técnico de la Real Sociedad en su aventura de este año en el Numancia, donde Bittor ejerce ahora como segundo entrenador.

Alkiza, uno de los mejores jugadores salidos de Zubieta, no pudo triunfar en el primer equipo como quisiera, y como logró en el Athletic. A pesar de ello, sigue siendo un jugador del que los seguidores realistas se sienten orgullosos de haber visto debutar, crecer (aunque sea en el eterno rival) y terminar su carrera como futbolista. Quizá el futuro le depara a Bittor otros éxitos en el club de su niñez, puede que como entrenador, o, tal vez, como presidente, al igual que lo fue su padre.