Un año más se celebró la XXVI Gala Nacional del Deporte de la AEPD, esta vez con sede en la Costa del Sol. El club sevillista fue uno de los distinguidos del evento, celebrado en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga, con dos premios en su haber. Tras conseguir el año pasado, en su vigesimoquinta edición el galardón correspondiente por la consecución de la UEFA Europa League, este lunes volvió a recoger el premio.

La final de Varsovia entre el Dnipro y el conjunto de Nervión, que se saldó con una victoria por 3 a 2 de los andaluces, ha permitido repetir éxito en la Gala y copar las vitrinas del club con un nuevo reconocimiento al buen estado del Sevilla FC en los últimos años. Junto con el cuadro del Sánchez Pizjuán, también fueron galardonados el FC Barcelona y el Athletic Club de Bilbao, por sus respectivos títulos en la pasada campaña.

El encargado de recoger el premio fue el presidente José Castro. Curiosamente, la persona que debía entregar el galardón fue Joaquín Caparrós, el que fuera técnico  sevillista durante cinco temporadas (2000-2005), y que sigue siendo el entrenador que más encuentros ha dirigido al equipo. Naturales de Utrera los dos, al momento entablaron relación y ambos dos se quedaron en el escenario durante el discurso del presidente.

Por otra parte, el segundo premio que recayó en Sevilla fue el obtenido por Josue Brachi, que es nada más y nada menos que el actual campeón de Europa en la modalidad de halterofilia que arrancó en el mes de octubre del pasado año. Tanto Josue como Castro posaron con sus respectivos galardones para postrar el buen estado del deporte sevillano. Quizá el año que viene el presidente deba volver a desplazarse a la Gala, si finalmente este año el Sevilla se alza con la Copa del Rey o con la Supercopa de España.