Ha habido algún cambio en el centro del campo sportinguista con respecto al año pasado. Tras la baja de Mascarell y la llegada de Xavi Torres, Abelardo ha decidido continuar con el doble pivote que tan dispares opiniones y resultados genera. Sergio Álvarez es el titular indiscutible desde hace tres años. El avilesino se ha establecido como la pieza fundamental de la medular y parece que no hay jugador hoy en día en la plantilla que le pueda hacer sombra. El otro componente de la pareja si ha sido más variado, con hasta cuatro jugadores diferentes ocupando este puesto. 

Las primeras tres jornadas de Liga fueron excelentes para el Sporting, con siete puntos de nueve posibles y todavía invicto. Nacho Cases fue el acompañante de Sergio en estos tres primeros encuentros, y realizando una gran labor ofensiva, el canterano del Sporting consiguió incluso anotar un gol, en casa ante el Leganés. Sergio no estaba desplegando su mejor juego, pero defensivamente aportaba un equilibrio que el equipo notaba, encajando solo dos goles en este comienzo de Liga. Cuando el ataque es efectivo y el equipo consigue encajar pocos goles, gran parte del mérito es de los centrocampistas, que estaban desempeñando una buena labor, engrandecida por las demás líneas del equipo.

A partir de ahí todo cambió, de los siete puntos de nueve posibles se pasó a no conocer la victoria en cuatro jornadas consecutivas. El 5-0 en el Vicente Calderón supuso un gran castigo y casi peor fue el juego ofrecido, con un Nacho Cases mostrando su peor cara, desesperado, y con sus nervios habituales en los partidos más flojos. Sergio tampoco era el de siempre, menos eficaz en ataque y desbordado en defensa. Tras la baja de Nacho Cases por una pequeña lesión, fue Xavi Torres el acompañante del habitual Sergio en Balaídos, en una alineación que tenía más novedades, como las de Afif o Viguera. Tras otra derrota y otro partido realmente gris, Abelardo decidió dar entrada otra vez a Nacho en casa contra el Barça. Esta vez el juego no fue del todo malo, pero realmente ineficaz. la aplastante superioridad azulgrana y su efectividad en ataque se vió reflejada en el resultado final de 0-5. 

En el último partido disputado, en Riazor, fue Moi Gómez el acompañante de Sergio en el doble pivote. El nuevo fichaje, que había jugado en ambas bandas e incluso en la mediapunta, no encajó bien en esta nueva posición y se notó en el partido, que el Sporting acabó perdiendo por 1-2. Además, el joven argelino Rachid también ha ocupado esta posición, saliendo desde el banquillo en varios partidos. Abelardo deberá encontrar la estabilidad en el centro del campo, muy importante, sobre todo, en el aspecto defensivo