Después de dos derrotas consecutivas, el Atleti B se reencontró con la victoria ante su público, que le arropó y le llevó en volandas hacia el liderarto pese a las difíciles condiciones metereológicas.

El día frío, nublado e intermitentemente lluvioso no pareció afectar al Atlético B que antes de que se cumpliesen los primeros cinco minutos de juego ya iba por delante en el marcador. Zaka aprovechaba un balón muerto en el área proveniente de un rechace de un centro desde la izquierda que había puesto él mismo para hacer el primer gol del partido. Este gol no amedrentó al Adarve que en la siguiente jugada estuvo cerca de empatar en el lanzamiento de una falta colgada al área que la zaga rojiblanca sacó bajo los palos. Esto no fue pasado por alto por Óscar Fernández, que no dejó de advertir a Acosta y Arona, los jugadores que defendían la banda derecha rojiblanca, por donde mayoritariamente intentaba atacar el Adarve, de que no hiciesen faltas que pudiesen propiciar centros al área.

Los minutos posteriores hicieron de estufa para el público presente en el Cerro del Espino, ya que el ritmo alto predominante y la presión en campo rival de ambos equipos no dejaba tiempo de pensar en el frío y la humedad. Las ocasiones no abundaban, y el peligro tenía lugar en las bandas sobre todo: Arona puso un par de centros que puso en vilo a la defensa del Adarve y los visitantes respondieron con una contra que dejó a Álvaro Sánchez delante de San Román y que a la postre sería invalidada por mano del ariete. Acto seguido el filial rojiblanco dobló su ventaja por mediación de Perales, que solo tuvo que empujar el balón delante de una portería que debido a la salida de De Las Heras estaba vacía. El portero visitante salió en busca de Rubén, que se quedaba solo delante del arco, pero que fue generoso y que cedió el balón a su compañero.

El propio Rubén tuvo que retirarse a la caseta minutos más tarde por una lesión. En este periodo de tiempo el partido se volvió algo bronco, con numerosas faltas, pero no le restó interés ya que el Adarve estuvo cerca de reducir su ventaja gracias a un cabezazo de Álvaro Sánchez, que aprovechó una mala salida de San Román. Como sucedió al principio del encuentro, la defensa colchonera sacó el balón bajo los palos.

Al filo del descanso, habría una sucesión de acontecimientos claves para el desarrollo del partido: primero, Perales haría el tercer gol del Atlético B –el segundo en su cuenta particular- con una preciosa vaselina. No menos bueno fue el pase de Arona a la espalda de la defensa del Adarve que dejó solo al bigoleador. Pocos minutos más tarde, el Adarve tendría la oportunidad de volver a meterse en el encuentro con un penalti, pero San Román –que hasta el momento había estado algo inseguro en sus salidas- hizo una gran parada. De este modo, se llegó al descanso con un gran resultado para los rojiblancos. El resultado no fue casualidad, sino que reflejo lo que se vio en el campo, donde el Atlético fue superior.

El amplio resultado a favor propició que al principio del segundo tiempo en la grada predominase la atención sobre el partido que Nadal y Federer estaban protagonizando en Australia. El sentir de la grada no contagió a los jugadores rojiblancos que no desplazaron su concentración a Australia, sino que siguieron metidos en el partido y acercándose al área rival aunque sin concretar con disparos a portería. El primer remate a puerta estuvo muy cerca de convertirse en gol, pero el cabezazo de Zaka se encontró con el palo. El centro lo puso Arona, uno de los jugadores más activos de todo el partido y uno de los mejores de la temporada del Atleti B. El otro jugador que estaba destacando por encima del resto en este segundo periodo era Nacho Heras, que estaba generando peligro con sus conducciones diagonales.

El filial colchonero mantenía su ventaja y tenía el partido dominado, pero Óscar Fernández seguía dando instrucciones desde la banda para que sus jugadores no se relajasen e incluso quiso aumentar el control y dio entrada a Cristian Rodríguez –centrocampista- en sustitución del goleador Zaka. El jugador recién incorporado empezó actuando como mediapunta y , después de que Olabe fuese expulsado, retrasó su posición al mediocentro.

En los minutos finales el gol del Adarve puso emoción al partido, ya que si hacían el segundo y el Atlético no marcaba más el gol average quedaba empatado. En estos minutos los visitantes se hicieron con el dominio del partido mientras el Atlético esperaba en su campo para contragolpear.

Pese a este dominio del Adarve y a la sensación de nerviosismo en los rojiblancos, los locales se hicieron con una victoria que les permite poner tierra de por medio con el Adarve, ya que la distancia se amplía hasta los seis puntos y, sobre todo, ponerse líderes después del empate del Móstoles URJC en Pozuelo. Anímicamente, la victoria también es importante ya que el filial colchonero venía de ser más irregular en las últimas jornadas.

ATM B 3-1 A.D. UNIÓN ADARVE