A medida que avanza la temporada, los nervios aumentan debido a las presiones futbolísticas. No era este el caso del Llagostera ni del Lleida, ya que los locales ya tienen la permanencia (casi) en el bolsillo, y el Lleida tenía la salvación en el bolsillo y los puestos de playoff relativamente lejos, pero también relativamente cerca. Gracias a la victoria conseguida en Palamós, los de Gustavo Siviero se ponen a dos puntos de la última plaza de playoff, ocupada por el Badalona. Si las carambolas y los resultados acompañan, podrían conseguir la deseada plaza.

En consecuencia, la relativa tranquilidad en ambos conjuntos se ha notado en el juego fluido, sobre todo en la primera parte, y que ha servido como señal de calidad y buen fútbol en el verde.

Fluidez y gol

La primera parte se caracterizó por ser la definición de buen fútbol. Pelotas arriba y abajo, triangulaciones, ocasiones para ambos, largas posesiones y sobre todo, fútbol. Y fue así como, muy temprano, llegó el primer gol. Después de que Manel tuviera en su cabeza el gol, Campos despejó la pelota de forma eficaz. Y no tardó el Lleida en contestar, que en una jugada posterior, el servicio de esquina rival fue rematado por Rubio, parado de nuevo milagrosamente por Moragón, cuyo rechace Nierga no dejó escapar para dar el único gol a su equipo, el gol de la victoria.

A partir de aquí, el dominio se fue alternando entre ambos conjuntos, con destellos de calidad colectivos. Destaca una jugada individual de Manel, que se zafó del portero para luego centrar el balón al segundo palo y no encontrar rematador. El Lleida también tuvo en sus manos el segundo gol, después que un disparo de Casares a la escuadra fuera parado de nuevo, milagrosamente, por Moragón. 

Y para concluir, Rafa Jordà tuvo en sus manos un rechace que salió desviado por encima de la portería de Campos. Al contrario que los goles, las oportunidades no faltaron.

Otro trámite burocrático

La segunda parte transcurrió más lentamente que la primera. Oriol Alsina probó suerte en la ofensiva, con la entrada al terreno de juego de Rubén Martínez, Marc Fernández, y más tarde del punta Manu Gavilán. No obstante, debido a las continuas 'faltitas', al control del balón por parte del Lleida, y a las escasas oportunidades, todas ellas frustradas, el partido se iba acabando sin que el Llagostera consiguiera adelantarse en el marcador o poner entre las cuerdas a los chicos de Gustavo Siviero. 

El árbitro prolongó el partido cuatro minutos, solo retrasando lo inevitable. Acabó el partido y ambos equipos jugaron bien. Pero ganaron los más listos, los que hicieron los deberes antes. 

Ya casi nada

Queda ya casi nada para acabar la temporada. El Llagostera necesita un punto para certificar oficialmente la permanencia, aunque a excepción de carambolas poco probables, los de la Costa Brava ya tienen su pase para seguir otro año en la categoría. Por su lado, el Lleida se sitúa cerca de los puestos de playoff. Para seguir en su lucha, deberán ganar al Valencia Mestalla y al Eldense en las dos jornadas restantes, algo que no será fácil. Sean lo que sean los designios del futuro, la temporada llega a su fin y en el medio de la tabla se duerme mejor.

Puntuaciones VAVEL 2B

UE Llagostera

Lleida Esportiu

Moragón 7.5 Campos 7.5
Masó 7 Óscar 7
Diego 6.5 Quintillà 6.5
Samu 7 Mikel

7

Fúster 6.5 Andriu 6.5
Vivancos 6.5 Noel 7
Rafa Jordà 6.5 Casares 7.5
Pitu Comadevall 7

Albisua

7

Manel

6.5 Nierga 7.5
Marc Martínez 6.5 Gómez 7
Maynau 6.5 Miki Muñoz 7
Suplentes
Rubén Martínez 6.5 Vázquez 6
Marc Fernández 8 Alfonso 6.5

Gavilán

6.5 Valiente 6