César Láinez ha atendido a los medios en rueda de prensa con el foco de atención colocado en el encuentro ante el Real Oviedo. Tras dos derrotas y un empate, la racha positiva de Láinez se ha empañado seriamente, evitando que el equipo cierre el objetivo de la permanencia. El técnico blanquillo ha dado las directrices a seguir para buscar de nuevo los buenos resultados: “Trataremos de ser fieles a nosotros mismos, jugar en el campo contrario, intentar adelantarnos en el marcador y tratar de gestionar las ventajas”. Siendo ese el principal de los problemas del conjunto zaragocista.

La falta de intensidad en algunos tramos del partido, la ausencia de balón y las segundas partes han sido los principales enemigos del Real Zaragoza. César, sabiendo la importancia de lo que hay en juego, ha tomado cartas en el asunto en los entrenamientos: "Hemos tratado de tirarnos al suelo durante 10 minutos todo el rato ensayando eso. A ver si con esas creemos que vamos a ser capaces de gestionar los partidos". Ese síntoma parece recordar al encuentro contra el Lugo en La Romareda, que habría acabado en victoria si se hubiera hecho una falta a tiempo. Parece por tanto que esa falta de intensidad que se encontró Agné continua todavía con Láinez.

El Real Zaragoza visita el Carlos Tartiere en una situación complicada para los asturianos. Estos salieron recientemente de la promoción de ascenso a primera división por lo que buscarán encontrarse de nuevo con la victoria en su feudo: "Ellos pelean por recuperar los puestos de promoción y nosotros por tres puntos que nos den la tranquilidad que necesitamos”. No obstante, los de Hierro acumulan solamente dos puntos de los últimos quince posibles, de manera que el Real Zaragoza no será el único en intentar revertir su situación en este encuentro: “Va a ser un partido entre dos equipos que saben lo que se juegan".