En una temporada que acaba con un descenso a Segunda es difícil quedarse con algún aspecto positivo. Este apartado obliga a eligir un encuentro y catalogarlo como 'el mejor partido' del curso del Granada CF. Es evidente que este tiene que ser una de las pocas victorias logradas por el conjunto rojiblanco horizontal en el año de su despedida de la Primera División. La goleada ante el Real Betis es el mejor partido realizado por los granadinos en esta difícil campaña.

Una goleada en el derbi andaluz

Los jugadores más determinantes del Granada aparecieron en esa noche de viernes en el partido contra el Betis para darse un festín y un homenaje a la afición que tanto había sufrido, y seguiría sufriendo hasta el término de liga. Carcela fue el primero en abrir la lata. Un excelente pase al espacio de Wakaso dejó a Carcela en un mano a mano con Adán, en el que el marroquí definió con una sublime vaselina ante el arquero bético. Y solo diez minutos después, poco antes de la media hora de juego, Héctor robó el esférico en la zona defensiva verdiblanca y le puso un caramelito a Adrián Ramos con un cabezazo imposible para Adán.

El vendaval continuó antes del descanso. Una gran contra de los locales finalizó con un recorte y posterior disparo de Carcela que sacó Adán con el pie. El rechace cayó a los pies de Pereira, que solo tuvo que empujar el balón a la red y poner el 3-0 en el electrónico. La primera mitad fue inmejorable para los intereses nazaríes. La afición estaba disfrutando más en un partido que en toda la temporada.

Adrián Ramos volvió a ver puerta a mediados de la segunda parte. Otro contragolpe local finalizó con un balón muerto para el colombiano que vio puerta por segunda vez en un partido, mostrando su verdadero olfato goleador. El Betis logró maquillar el resultado en un saque de esquina cabeceado por Petros al fondo de la red. Pero ni siquiera eso inquietó al Granada CF y a su afición en el mejor partido realizado por los rojiblancos horizontales en la temporada 2016/17.