El uno de septiembre se acerca y el Cádiz no ha completado todavía su plantilla por completo. A lo largo del mercado de fichajes, se han dado hasta once altas y otras once bajas. Pero aún falta algún jugador por llegar, y también llegar a un acuerdo para la marcha de otros.

En cuanto a la portería, la baja por decisión propia de Jesús Fernández debido a la falta de minutos, y la del tercer portero Álex Lázaro, cedido al Mérida, han obligado al club a buscar sustitutos. Rubén Yañez, procedente del Getafe (que pagó su ficha al Real Madrid, para después cederlo al Cádiz) y David Gil, del Getafe B, completan el puesto.

La defensa fue durante la temporada pasada, uno de los pilares sobre los que se cimentaba el equipo. Tanto es así, que la zaga amarilla consiguió ser en su vuelta a Segunda División la cuarta menos goleada de la categoría. Para que esta base defensiva mantenga su nivel, la dirección deportiva ha efectuado varios fichajes de calidad, ya que algunas piezas del esquema se han desvinculado del club. Las marchas de Malón, Migue, Luis Ruiz y Aridane, han obligado a traer a Robert Correa, lateral derecho del Elche; Lucas Bijker, lateral izquierdo que llega desde el SC Heerenvenn holandés; Marcos Mauro, Mikel Villanueva y Kecojevic, defensas centrales procedentes del Villareal “B”, Málaga y FC Zürich suizo, respectivamente. Brian Oliván también aterrizó en Cádiz, tras el pago de su clásula de compra, al igual que Tomás Sánchez, quien volvió de su cesión en el Granada “B”. La situación actual en el lateral zurdo, con tres futbolistas, obliga al Cádiz a deshacerse de uno de ellos. El que se marchará es este último, Tomás, aunque no se sabe si en forma de cesión o venta.

Tomás y Eddy Silvestre serán salidas seguras

En el centro del campo apenas ha habido movimientos. José Mari, Garrido y Abdullah, seguirán comandando la sala de máquinas del conjunto gaditano. Tan solo se ha contratado a un jugador: Álex Fernández, que jugó el curso pasado en el Elche. Su llegada ha hecho que Cervera no cuente con Eddy Silvestre, al que se le buscará salida en estos últimos días de mercado. Por el mismo motivo, otro de los componentes del cuadro amarillo que han causado baja es Alberto Quintana. Joven prometedor de la cantera, pasó la campaña anterior entre el Cartagena y el Rayo Majadahonda, en busca de minutos. Este verano, tras realizar la pretemporada, se le comunicó que no contaban con sus servicios, vendiéndolo al filial del Levante.

Ortuño y Aketxe, jugadores clave la temporada pasada, han regresado a sus clubes tras la cesión

Por último, la línea de ataque. Los futbolistas que imprimen velocidad y desborde al equipo han permanecido en su mayoría en la plantilla. Salvi Sánchez, Álvaro García, Aitor García y Nico Hidalgo continúan un año más en Carranza. Además, se ha contratado a Moha Traoré, extremo diestro que había jugado hasta ahora en el Córdoba “B”. En la delantera, sin embargo, nombres como Ortuño, Gorka Santamaría y Dani Güiza han hecho las maletas. Se ha fichado para suplirlos a David Barral, del APOEL; y a Dani Romera, del Barcelona “B”. Para la posición de enganche o mediapunta, se ha perdido a Aketxe, que volvió al Athletic Club, después de media temporada de cesión. Durante la estación estival, se ha intentado de nuevo su llegada, pero ha resultado imposible. Para olvidarlo, se contrató a Alberto Perea, compañero en el último curso de Dani Romera en el filial barcelonista; y se renovó por un año a Rubén Cruz. Jesús Imaz, que continúa en la Tacita de plata, no cuenta en los planes del entrenador, por lo que puede que también se le busque acomodo en otro club.

Con todo y con ello, a Álvaro Cervera le faltan algunos detalles por pulir. Quiere un delantero centro, un nueve parecido al perfil que tuvo con Ortuño. Esa es su petición, y la directiva no se cierra a la incorporación suscitada. En cuatro días, se sabrá quiénes conformarán al completo la plantilla del “submarino amarillo”.