El killer de Utrecht fue un referente en el ataque grana durante dos temporadas. En su primer partido en el Nou Estadi, el holandés dejó para el recuerdo dos grandes goles ante el Girona. La imagen del delantero celebrando un gol con los brazos extendidos ha quedado en la memoria de todos los ‘nastiquers’. Powel fue un referente para el Nástic, pero su salida del club no fue la mejor. Un rumor de que se había lesionado saliendo de fiesta y de que le gustaba mucho la noche precipitó su salida del club. Aun así, el killer siempre será recordado en ‘Can Nàstic’ y por eso… ¿Qué fue de Berry Powel?

Antes de jugar en el Nàstic, el delantero empezó en su tierra, en Holanda. Allí jugó con el  Groningen en la primera división holandesa para después recalar en el ADO Den Haag. En la temporada 2010/11 abandona el equipo holandés para fichar por el Nástic, donde dejó 20 goles en las dos temporadas que disputó se fue al Elche.  En el equipo valenciano marcó 3 goles en 23 partidos jugados. Después de su breve paso por la liga española puso rumbo a su liga natal de nuevo. Jugó en el Heracles, de la primera división holandesa; el Kozakken Boys, de la tercera del mismo país y el iJsselmeervogel, con el que consiguió ascender a la liga Tweede Divisie.

Su final en el Nástic no fue el deseado por los aficionados grana. Por la ciudad de Tarragona corrió el rumor de que el delantero, lesionado, salió de fiesta por una discoteca famosa de Salou. Su salida del club se precipitó por actos como este, pero en el Nástic siempre lo recordaran por sus goles y por su poderío en el juego alto. Powel tiene 37 años y está disfrutando de sus últimos encuentros como jugador de fútbol profesional.