La selección española Sub-21 demostró su calidad ante el conjunto eslovaco en un encuentro importante para la clasificación para el Campeonato de Europa. El resultado (1-4) es una clara muestra de la superioridad española sobre el terreno de juego del estadio de Poprad. Un estadio que llevó en volandas a su selección, que ejerció una gran presión desde el principio. En definitiva, tres puntos esenciales para la Rojita que cada día ve más cerca su clasificación para la Copa de Europa Sub-21.

El conjunto dirigido por Albert Celades llegaba al choque frente a Eslovaquia con la vuelta de los lesionados Pablo Maffeo y el joven central del Real Madrid, Jesús Vallejo. Ambos partieron como titulares en la alineación dispuesta por el técnico español para el partido. Además, Celades introdujo una variante en la portería, dando la titularidad a Unai Simón en detrimento del portero del Alavés, Sivera. Durante el partido, la mala suerte se cebó con el central del Sporting, Jorge Meré, que tuvo que ser sustituido en la primera mitad por lesión dando entrada a Núñez. Seguramente, este fue el único punto negativo de una noche completa en el resto de los aspectos.

En el transcurso del partido, España demostró su calidad circulando el balón de un lado a otro del campo con velocidad ante la intensa presión de Eslovaquia. Ese continuo movimiento de la pelota desgastó a los eslovacos que vieron como el combinado español les pasaba por encima. Una defensa sólida, una delantera con mucha movilidad y sobre todo, un centro del campo envidiable que estableció las bases de una gran actuación. En esa medular, el criterio y la circulación de balón lo ponían Rodri y Mikel Merino, mientras que el mediapunta merengue, Dani Ceballos, le imprimía verticalidad y velocidad al juego, desbordando una y otra vez provocando alguna tarjeta amarilla para los eslovacos en los primeros compases del partido.

El gol no tardó en llegar, fruto del buen juego español. El primero fue obra de Mikel Merino gracias a una asistencia de Oyarzábal justo antes de la primera media hora de juego. Ya en la segunda mitad, España siguió mostrando su dominio y llegaron más tantos. El segundo gol para la cuenta de España lo hacía Oyarzábal al comienzo de la segunda parte. El tercero caería minutos después gracias a una gran jugada del conjunto español que culminó el medio centro Rodrigo. Por parte de Eslovaquia, el gol del honor lo anotó Vavro, tres minutos después del tanto de Rodrigo. Finalmente, el jugador del Real Madrid, Dani Ceballos, anotó el cuarto gol para  la cuenta española en los minutos finales de un encuentro que ya estaba claramente decidido a favor de la selección española Sub-21. Se cerraba así un marcador abultado pero justo tras lo sucedido en el campo, y que demostraba la superioridad de los hombres de Celades sobre el terreno de juego.

Con esta victoria, la Rojita vuelve a mostrar su talento y consigue tres puntos esenciales en la Clasificación para la Eurocopa Sub-21, sumando dos victorias en dos encuentros. Está claro que el relevo generacional de la selección absoluta está garantizado con tanto diamante en bruto en el equipo dirigido por Albert Celades. Afortunadamente, España tiene un grupo de futbolistas con un futuro brillante y talento para muchos años.

El próximo encuentro que tendrá que disfrutar la selección española Sub-21 será frente a la selección Sub-21 de Islandia, el día 9 de noviembre, en un encuentro que deberán ganar los hombres de Albert Celades si quieren ver más de cerca el objetivo de clasificarse para la Copa de Europa Sub-21. Hasta ahora pleno de victorias y la sensación de que el equipo mejora cada día más. Si todo sigue así y los futbolistas continúan a este nivel, la clasificación de la Rojita está asegurada, pero en el fútbol nunca se sabe. De momento, buenas sensaciones y gran resultado frente a la selección eslovaca Sub-21.