Iba a empezar el partido en Rusia en un estadio apenas lleno. Los jugadores saltaban entonces al campo y destacaban varios titulares como el exjugador del Valencia Jordi Alba, Iniesta, De Gea, Ramos y Piqué, sin embargo, también destacaba la presencia de uno de los jugadores de moda del momento, Rodrigo Moreno. Saltó al campo luciendo el dorsal 19, sustituyendo así en la “posición del 9” a Morata.

Cuarenta y cinco minutos en la sombra

Una vez comenzado el encuentro se vio poco a Rodrigo durante los primeros minutos de juego, algo normal dado que el partido se estaba construyendo aún.

No tardó mucho Jordi Alba en subir el primer gol al marcador, un gol que de no haber sido marcado por él habría recaído en Rodrigo, que esperaba al balón tras de sí. Tampoco tardó en llegar una de las pocas ocasiones del jugador valencianista, quien tras un buen tiro no volvió a aparecer en el campo durante un buen rato. Dejando de lado alguna ocasión esporádica de ambos conjuntos, Rodrigo seguía sin conseguir acabar sus jugadas y poco después llegó el segundo gol de La Roja tras un penalti dudoso, ya que al parecer el balón no es golpeado en la mano del jugador ruso, sino en el codo. Rusia supo aprovechar una serie de fallos en la defensa española y, con un gran gol, consiguió meterse en el partido.

Un último intento de Rodrigo por controlar el balón fue lo que culminó con una primera mitad poco convincente por parte de todos los jugadores.

Estuvo cerca el gol durante la segunda mitad

Continuó el partido en Rusia con una serie de cambios marcados por Julen Lopetegui, un Rodrigo más activo y dos goles posteriores, uno por parte de la Selección Rusa y otro de penalti anotado a favor de la Selección Española.

Se vería entonces algún toque de calidad ocasional del jugador valencianista, a quien se le veía pidiendo más balones, corriendo e intentando marcar un gol. Tras salir Thiago dolorido del campo, alguna ocasión aislada ocurriría en el terreno de juego, a pesar de ello el balón seguiría sin llegar a Rodrigo a quien se le vio presionando a los defensas rusos varias veces. Llegó entonces su primera ocasión clara de gol, sin embargo sería detenida por un golpe en el pecho del balón en el portero contrario. Un tercer gol de la Selección Rusa provoca un nuevo empate en el marcador, 3-3. Ya complementado con sus compañeros en la delantera de La Roja, Rodrigo seguía intentando marcar, desmarcándose varias veces e incluso yendo en paralelo con jugadores como Vitolo con el objetivo de encarar solo al portero. Ocurriría entonces uno de los últimos acontecimientos del partido, además protagonizado por el jugador valencianista. Este se chocaría de manera mutua con el portero ruso, quien sufrió un duro golpe con la rodilla en la cabeza, mientras que Rodrigo caería dolorido al césped.

Tras salir en camilla el portero rival se pitaría el final del encuentro. El final de un partido con pocas luces en el cual, exceptuando alguna aparición esporádica del jugador del conjunto ché, se habría visto a un Rodrigo lejos del nivel que presenta de normal en el Valencia CF.