El año 2017 para Carrasco ha tenido dos partes muy diferenciadas, en las cuales se ha visto su mejor versión como futbolista y su versión menos comprometida con el equipo. Todo esto con un verano de por medio que parece haber sido el germen de esta desconexión que nadie logra entender y por la cual ha terminado el año en el banquillo sin disputar minutos.

Su 2017 hasta final de temporada

Carrasco empezó el año como un tiro, venía de hacer una magnífica primera parte de la temporada dónde era indiscutible, marcaba goles y su juego desequilibrante daba puntos al conjunto rojiblanco. Era uno de los ídolos de la afición por su gran trabajo sobre el campo y muchos clubes europeos querían contar con él en sus filas debido al gran rendimiento que estaba demostrando. En todas las competiciones contaba con la confianza de Simeone y el belga se la devolvía a base de buenas actuaciones, se había hecho con un puesto fijo en el once titular después de mucho esfuerzo y trabajo. 

Pero una pequeña crisis a principio de año hizo que saltaran chispas entre Simeone y Carrasco. El argentino le colocaba en posiciones en las que el "10" no se sentía cómodo y eso hacía que no jugara al nivel exigido, llegando al punto de dejarle fuera del equipo en alguna ocasión. Pero esta situación tardó poco en solucionarse y poco a poco volvió al once inicial convirtiéndose de nuevo en uno de los jugadores más importantes. 

Carrasco durante la ida de semifinales de Champions contra el Real Madrid (3-0) Fuente: www.atleticodemadrid.com)
Ida de semifinales de Champions contra el Real Madrid (3-0). Fuente: (www.atleticodemadrid.com)

El extremo del Atlético de Madrid terminó la temporada 2015-2016 jugando 3.434 minutos, 1.032 minutos más que la pasada campaña, esto se traduce en 53 partidos disputados, de los cuales fue titular en 42 ocasiones. Pero el mayor crecimiento de sus números se pudo ver de cara a puerta, donde logró 14 dianas, frente a los 5 de la pasada campaña, lo que le situó como tercer máximo goleador del equipo.

Estos números a final de temporada demuestran que su proyección durante esa campaña fue estratosférica, siendo uno de los jugadores que más crecieron dentro del equipo y consagrándose como una de las estrellas del fútbol europeo. Pero al volver de vacaciones algo cambió en Carrasco que no le hizo ser el mismo jugador que deslumbraba a media Europa.

Inicio ilusionante de la nueva temporada

Yannick volvió a los entrenamientos después de las vacaciones de verano con las pilas cargadas y dispuesto a continuar su ascenso cualitativo una temporada más, pero a medida que pasaban las semanas se especulaba más sobre su permanencia en el club rojiblanco, ya que grandes equipos como PSG, Bayern, Chelsea o Arsenal andaban detrás de él desde hace tiempo. No fue hasta el último día del mercado de fichajes cuando Carrasco confirmó que se quedaba en el Atlético, noticia que alivió al equipo, ya que la entienda rojiblanca no podía fichar hasta principios de año debido a la sanción de la FIFA. Con esta situación se empezaron a ver esos indicios de falta de compromiso que le condenaron a finales de año.

Entrenamiento pretemporada en San Rafael. Fuente: www.atleticodemadrid.com
Entrenamiento pretemporada en San Rafael. Fuente: www.atleticodemadrid.com

Comenzó bien la nueva temporada marcando, asistiendo y desbordando, más o menos en la línea de la anterior, pero no contaba con los minutos que a él le gustarían y esos empezó a molestarle y a bajar su nivel, mientras que otros compañeros le quitaban el puesto.

Problemas en el vestuario

Según avanzaba la competición y los resultados personales y colectivos no eran los esperados, empezaron los problemas con los pesos pesados del vestuario. La relación de Carrasco con el vestuario nunca ha sido la mejor, debido a que muchas veces piensa más en si mismo que en el equipo, lo que le ha llevado a tener algún que otro enfrentamiento verbal con el capitán Gabi. El mismo enfado que podían tener sus compañeros lo tenían los aficionados, que veían como uno de los mejores jugadores del equipo, en cuanto a calidad, se estaba desvinculando del grupo y sus actuaciones pasaban desapercibidas.

El partido en Bakú

El detonante de esta situación se produjo en el partido de Champions League que jugó el Atlético de Madrid frente al Qarabag en Bakú. En este partido Carrasco fue sustituido cuando el encuentro estaba empatado a cero, y el jugador belga abandonó el terreno de juego andando y con parsimonia, como si el encuentro no fuera con él. Esto provocó el enfado total de la afición que veía como el jugador no tenía la actitud que demandaba la situación en ese momento. Este gesto no pasó desapercibido para el cuerpo técnico que tomó cartas en el asunto.

Después del partido en Bakú, Carrasco estuvo un tiempo sin jugar a causa de una lesión en la rodilla. Tras su recuperación el belga sólo ha disputado dos partidos de titular, ante el Elche en Copa del Rey y ante la Roma en Champions. Sus minutos han mermado considerablemente debido a la actitud diaria que nada gusta a Simeone, tanto es así que el último partido de Liga lo ha visto completo sentado en el banquillo, ya que ni sus calentamientos antes de entrar al terreno de juego los realiza con la intensidad que debe.

Carrasco de suplente esta temporada. Foto: Daniel Nieto | VAVEL
Carrasco de suplente esta temporada. Foto: Daniel Nieto | VAVEL

El 2017 parecía el año en el que Carrasco deslumbraría al mundo, y así fue durante la primera mitad del año, pero parece que su estrella se ha ido apagando poco a poco hasta el punto de ir convocado y no jugar ni un minuto durante dos partidos consecutivos.

Podemos concluir que el año de Yannick Carrasco ha sido un año de luz y sombra, diferenciando claramente los dos periodos opuestos, donde ha habido más luz pero parece que ya nadie se acuerda y sólo se habla de la sombra en la que reside actualmente.