Las oportunidades de permanecer en Primera División la próxima temporada se van agotando y el Málaga no las va aprovechando. Encima ahora le toca un tourmalet que tampoco invita al optimismo. Para más inri, sus rivales más inmediatos en la clasificación están sumando y se están empezando a alejar peligrosamente.

Ahora le toca el turno al Valencia. El equipo ché lleva una temporada espectacular. Ha vuelto a la senda del éxito y las victorias y, con ello, el volver a estar arriba en la clasificación y ser considerado un equipo aspirante a cosas importantes. 

De la mano de Marcelino, el conjunto valencianista ha logrado implantar un estilo de juego basado en la posesión y el ataque rápido. Con jugadores de banda veloces como Guedes, Andreas o Soler, la verticalidad está asegurada. 

La portería también ha sido muy bien reforzada esta temporada. Llegó el brasileño Neto desde la Juventus, dónde no tenía posibilidad de minutos a la sombra de Buffon. El cancerbero ha conseguido mantener la estabilidad que se echaba en falta en la retaguardia. 

En defensa también ha conseguido Marcelino mejorar. Con 27 goles en contra en lo que va de Liga, es uno de los equipos que menos ha salido goleado. Y buena culpa de ello la tienen Garay, Gabriel Paulista o Kondogbia. Con la llegada en el mercado invernal del francés Coquelin, esta zona se ha visto más reforzada aún.

La zona de tres cuartos hacia delante no está exenta de calidad y trabajo. Dani Parejo sigue aportando su visión de juego y calidad en el libre directo y arriba Zaza, Rodrigo o Santi Mina no dejan de golear. El acierto en la portería contraria de estos tres delanteros ha sido una de las claves para que el equipo ande tercero en la tabla. Bastante fe de ello puede dar el Málaga, quién recibió 5 goles en el partido disputado en la primera vuelta en Mestalla.

Difícil papeleta la que tendrán, por enésima vez, en el conjunto dirigido por Jose González. Un técnico que espera que sus nuevos fichajes se adapten lo más rápido posible y empezar a sumar de tres en tres de una vez por todas.