Tras ocho partidos al frente del equipo malacitano, cosechando tan solo dos puntos; además de igualar las seis derrotas consecutivas de Juande Ramos en la temporada 2003-2004, la afición empieza a mostrar síntomas de desconfianza respecto al técnico andaluz.

Un técnico andaluz que empezó acumulando dos empates en sus dos primeros encuentros, en los que la imagen del equipo parecía haber mejorado. Pero nada más lejos de la realidad, el club sigue sin mostrar una actitud y una implicación propia de un equipo que quiere permanecer la temporada que viene en la máxima categoría del fútbol español.

José González sigue arraigado a su filosofía de que, en cuanto el equipo consiga una victoria, esta conllevará una mejora a nivel anímico que permitirá al conjunto blanquiazul afrontar el resto de partidos desde una perspectiva más positiva. Pero esta victoria nunca llega.

A ocho puntos de la salvación (aumentando esta distancia a cada jornada que  concluye) , contando con tan solo trece en su casillero de puntos, al técnico gaditano parece acabársele el crédito. En nuestra encuesta formulada en twitter hacia la afición malaguista, tan solo un 2% confía en el míster y no se plantea un cambio de entrenador a estas alturas de la temporada (recordemos que quedan tan solo once jornadas para la conclusión de la misma).

En cambio, un 52% de los encuestados piensa que cambiar al entrenador no servirá para nada. Tal vez el fallo principal de esta mala temporada no resida en la figura del míster.

El 45% restante opina que el técnico debe abandonar la entidad blanquiazul cuanto antes. Para este porcentaje, la situación aún es enmendable, el error reside en la mala gestión de los dos técnicos con los que ha contado el equipo a lo largo de la temporada; y con un técnico más competente se puede conseguir la salvación.

Tres opiniones distintas que desvelan la desconfianza de la afición con José González. Desde la directiva no se espera un nuevo cambio de entrenador, aunque esta opción no debe ser descartable