La llegada de Juan Antonio Anquela supuso más que una nueva forma de trabajo para los jugadores del Real Oviedo. Muchos lo llegaron a calificar como un soplo de aire fresco tras la discreta temporada protagonizada por Fernando Hierro. Nuevos métodos de trabajo y nueva disciplina. Se puede decir que Anquela posee el carácter que tenía Hierro y a mayores, el suyo propio. Prueba de ello fue una reacción que se ha convertido en viral, cuando el entrenador sustituyó a un jugador en su etapa en la SD Huesca y este reaccionó mal. Pero Anquela no iba a ser menos e impuso su ley como líder del vestuario. Ese comportamiento cautivó desde el primer momento a los aficionados carbayones, que vieron la llegada del jienense como un método de trabajo apropiado para su equipo. Se puede ganar o perder, pero siempre trabajando como los que más. Ese es el lema que impuso “Anquelotti” en el vestuario y que hasta ahora se está cumpliendo a rajatabla.  

Competir. Eso es lo que busca Anquela en todos los equipos que ha entrenado hasta ahora. Porque compitiendo tarde o temprano se consiguen los resultados y se consigue esa regularidad necesaria para conseguir grandes objetivos -y más aún en una liga como esta-. Para ello, no ha dudado en cambiar el esquema de juego durante esta temporada. Se le puede considerar como un entrenador polivalente, dentro de la sobriedad y sus principales credenciales, claro está. Prueba de ello, es que a lo largo de este curso ha utilizado varios esquemas. Al principio de temporada utilizaba a dos delanteros en la punta de ataque, Toché y Linares. Más tarde, optaba por Toché como único referente y con una línea de tres por detrás. Con el paso de las semanas, el Real Oviedo incorporó a un centrocampista de contención, Mariga, y eso hizo que el jienense se decantase por un 4-3-3. Finalmente alineó una defensa de tres con dos carrileros largos y es la formación que ha venido usando en las últimas jornadas; por lo que lo más seguro es que el Real Oviedo juegue con un 3-4-2-1 en el Anxo Carro.

Es sin duda, uno de los entrenadores más carismáticos del fútbol español. Con su llegada, el Real Oviedo no solo cuenta en su disciplina con un técnico que lleva 20 años entrenando al máximo nivel, si no que también es uno de los más queridos y alabados. Durante su carrera como entrenador ha dirigido a equipos como Melilla, Jaén, Huesca, Granada, Numancia, Alcorcón; y todos ellos guardan un grato recuerdo de “Anquelotti”. Incluso ha sido capaz de regalar grandes gestas, como eliminar de la Copa del Rey a todo un Real Madrid, lo que pasó a la historia del fútbol como el “alcorconazo”.