Si la situación del Málaga es crítica, la del Deportivo de la Coruña no es mucho mejor, pues  le cuesta mucho llegar a puerta y sus puntos en la clasificación general así lo demuestran, 20 puntos en 30 partidos, solo tres más que el equipo costasoleño, que puede igualarles si consiguen una victoria en Riazor, como ya se consiguió en Málaga.

Al contrario que su rival, que viene motivado tras una lograda victoria ante el quinto de la clasificación, el Deportivo no gana desde la jornada 15, con 3 puntos en la últimas 10 jornadas con un Seedorf que no da con la sinfonía del equipo provocando que el equipo coruñés desentone más que antes, aunque a nivel defensivo el equipo ha experimentado una notable mejoría, la producción ofensiva ha caído en picado con solo dos 2 tantos en 7 partidos. En resumen, un balance tan sumamente negativo que empeora y mucho el de sus antecesores en el puesto, Pepe Mel y Cristóbal Parralo.

Estos datos  hacen del todo inviable pensar en una salvación, que aunque sea posible matemáticamente, al igual que ocurre con los hombres de José González, no tiene pinta de hacerse realidad, ya que este Dépor empeora ya incluso los números de la temporada 2011-2012, aquella que acabó con un descenso a Segunda División y por la que circularon tres técnicos en el banquillo; Oltra, Domingos Paciencia y Fernando Vázquez. En aquella temporada el Dépor sumaba un punto más que el actual tras la jornada 30, unos números que acabaría mejorando gracias al gran final de temporada de aquel Dépor de Fernando Vázquez que se quedó a las puertas de la salvación. 

No cabe duda, que si el Depor consigue ganar al Málaga, los andaluces tendrán los dos pies en Segunda, pero como sean ellos los que lo hagan, la lucha por la permanencia estará más viva que nunca y afrontarán la recta final con una dosis extra de motivación.