El Eibar recibe al Espanyol en un partido, que se ha convertido en un duelo de necesitados. Si hasta hace pocas jornadas, ambos equipos eran candidatos a estar en la pelea por las plazas de Europa League. Ahora ambos son dos equipos que ya no se juegan nada más que el honor.

La temporada de los de Quique Sánchez Flores prometía bastante, con un esquema de juego definido y un equipo que respondía a las exigencias del entrenador. Sin embargo, una racha de cuatro partidos sin ganar les han alejado de la posibilidad de ocupar plaza europea. Ahora mismo, marchan decimosextos con 36 puntos a 12 del Villarreal que tiene 48.

Situación convulsa

El Espanyol llega al partido dentro de una nebulosa de crispación por parte de la afición y de la directiva, que exige otros registros al equipo. De hecho, Quique se ha referido a esta cuestión: "Entiendo que en las carreras largas al final es imposible. Todos tienen situaciones mejores o peores en su carrera. No me preocupa demasiado, soy una persona bastante superviviente. Mi recorrido me ha dado una cierta seriedad. Estoy educado en una familia de artistas que se han dedicado a llegar a la gente. No llego y eso me frustra, me provoca una profunda tristeza. No es que quieras caer simpático, quieres que tu obra se acerque y provoque una ilusión".

Defensa poco expeditiva

Es cierto que el Espanyol no tiene un juego virtuoso, pero al menos es eficaz arriba con Gerard Moreno. Sin embargo, paga bien cara la contundencia de falta atrás.

Esta temporada ha encajado 39 goles. Lo que ha dejado como principales señalados a Pau López, y la planificación deportiva que ha provocado que los principales zagueros estén lesionados.

Duarte y Naldo, ha sido la pareja de centrales predilecta por Quique. Pues bien, para este partido ambos son baja por lesión. Tendrán que jugar, el multiusos David López y Hermoso. Para rematar la desdicha perica, su lateral derecho titular, será Víctor Sánchez. Ya que Javi López, ha perdido en cierta medida la confianza del míster.

Peligro por banda, mediocentro poco creativo

Carlos Sánchez y Sergi Darder, son los dos mediocentros que suele utilizar Quique en su esquema. Ambos son de corte defensivo, en el caso del catalán, es cierto que tiene algo más de creatividad, pero en cualquier caso el oficio y el trabajo es su principal baza. Por lo que el peligro se genera por las bandas.

Piatti y Melendo, junto con Baptistao que baja a recibir. Son las principales armas con las que el Espanyol enlaza el centro del campo con la delantera. Si se genera algo de fútbol es ahí. Del argentino Piatti, podemos decir que es rápido y habilidoso, puede ser un quebradero de cabeza para Capa. Además tiene gol, por lo que hay que tenerle muy presente.

En el caso de Melendo, es la revelación de la temporada en el equipo perico. Desde aquel gol que dio la victoria al Espanyol en Cornellá, en Copa ante el Barça, ha sido uno de los fijos de Quique. Más si cabe, teniendo en cuenta que Sergio García ya no está para jugar todos los partidos, y Baptistao adelanta su posición.

Gerard Moreno, la gran amenaza perica

Desde que volviera al Espanyol en el año 2015 procedente del Villarreal, no ha parado de crecer. No duda en echarse al equipo a la espalda cada vez que lo necesita y además suele obtener el premio del gol.

Pese a la crisis goleadora que acusa el Espanyol. Lleva 378 minutos sin marcar un gol, Gerard lleva 12 tantos y una asistencia. Es la principal amenaza del Espanyol y la zaga ibarresa deberá marcarlo de cerca.

Ha sonado en diversas ocasiones para las listas de Lopetegui, sin embargo aún sigue por detrás de los Costa, Rodrigo o Iago Aspas.

El once ante el Eibar

Teniendo en cuenta las bajas que tiene Quique, este es el más que probable once que alineará el técnico del Espanyol: Pau López; Víctor Sánchez, David López, Hermoso, Dídac; Melendo, Sánchez, Darder, Piatti; Baptistao, Gerard Moreno.

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Sobre el autor
Carlos Martin
Estudiante de periodismo en la UC3M. Redactor en Vavel Eibar, Vavel Atlético de Madrid, Capital Deporte Villarreal y Capital Deporte Atlético de Madrid. Rugbyer en mis ratos libres.