Imprevisible y sin memoria, el fútbol ofrece unos caminos que, en algunas ocasiones, no se pueden entender. El once inicial del Real Madrid para la final de la Copa de Europa parecía más que cerrado cuando ahora, a escasos días del encuentro, llega un galés llamando a las puertas de la titularidad demostrando por qué está vistiendo la camiseta blanca. Sus esfuerzos en las últimas apariciones del ente blanco han sembrado dudas en las mentes de los madridistas.
Dos preguntas rodean a Gareth Bale. La primera es si el galés debe seguir o no la próxima campaña en el club, a lo que podemos encontrar disparidad de opiniones. Cierto es que sin Cristiano Ronaldo en el terreno de juego, Bale ha encabezado gran parte de las últimas victorias sin echar de menos ofensivamente hablando al portugués. Esto le otorga un gran argumento a favor al que se agarrará en un futuro.
De hecho, contra el Celta volvió a demostrar que quiere quedarse. Volvió a demostrar que altibajos puede tener cualquiera y que el Gareth Bale que todos conocen estará de vuelta si cuenta con más confianza. No obstante, hay que ser objetivos: estas últimas apariciones que se han mencionado han sido partidos en los que el Real Madrid no se jugaba prácticamente nada, ya que cuando sí lo ha hecho, Bale no ha estado a la altura de sus espectativas.
Kiev, casi imposible
Olvidando el futuro más lejano, la otra pregunta es más importante: ¿sus últimas actuaciones le dan credenciales para ser parte del once inicial de Kiev? Lejos de polémicas, la titularidad en Champions se paga muy cara y Gareth Bale no ha formado parte del once titular en Europa desde aquel partido en el que la Juventus estuvo cerca de arrebatarle al Madrid un puesto en las semifinales.
Por lógica, la respuesta a la segunda pregunta parece más obvia que la primera. Es muy difícil que Zidane vaya a cambiar el esquema táctico que tiene pensado desde que la clasificación para la final. Gareth Bale tiene aún mucho que mejorar por delante puesto que su irregularidad le suele causar mucha desconfianza al técnico francés. Es posible que sea parte de los cambios, pero muy difícil que sea titular.
Una oportunidad más
A favor del galés hay que decir que el madridismo no puede olvidar el desempeño que ha tenido casi siempre en la Champions y defendiendo los colores del club en general. La velocidad del expreso de Gales sigue siendo una baza ofensiva que utilizar en casos en los que se necesite un rápido contraataque. Por ello, Zidane sabe que tiene que darle más oportunidades de cara a la siguiente temporada para recuperar su mejor versión.
Grandes nombres suenan para el próximo mercado de fichajes y muchos desean saber qué será de Gareth Bale. Aún no se sabe a ciencia cierta si seguirá en el club madridista, pero ha mostrado que, en ausencia de Cristiano Ronaldo y con más confianza de la que actualmente posee, Bale puede darle todavía muchas alegrías al Madrid. Tal vez sea solo cuestión de confiar.