Tres semanas después de la presentación de Vicente Mir, el nuevo timón de la nave blanquiazul en el que será el décimo proyecto de Juan Serrano al frente del Deportivo, el Alcoyano empieza a sentar las bases de la que será su plantilla para la próxima temporada 2018/2019, en la que el club espera mejorar los registros y las sensaciones tras cerrar una campaña decepcionante.

La secretaría técnica blanquiazul, pese a no prodigar en exceso sus decisiones, está trabajando en la confección del nuevo plantel desde antes de la finalización del pasado curso futbolístico. Prueba de ello es el fichaje de Rubén López, conocido en el mundo del fútbol como Rubio. La incorporación del delantero se fraguó antes del cierre de la liga y estuvo avalada por la figura de Miguel Hita, hombre importante en la comisión deportiva alcoyanista y, a la sazón, representante del delantero alicantino.

La lucha, el trabajo y la adaptabilidad a todo el frente de ataque son algunos de los rasgos definitorios de Rubio que, pese a su juventud -cumplirá 23 años este domingo y ocupará por tanto una ficha sénior-, posee sobrada experiencia en el Grupo III de Segunda División B, donde ha disputado ya cerca de 90 encuentros repartidos entre Ilicitano, L’Hospitalet y Deportivo Aragón. Con los tres equipos, sin embargo, consumó el descenso a Tercera División.

El punta alicantino, hermano del también delantero Carlitos, puso todo de su parte para evitar tan mal destino. Debutó en la Categoría de Bronce en el filial franjiverde a las órdenes del que ahora volverá a ser su técnico, Vicente Mir. Tras el descenso del Ilicitano firmó por L’Hospitalet, donde firmó siete dianas y, pese a que el conjunto de la Feixa Llarga perdió la categoría, el Alcoyano se interesó en él, pero una oferta del Deportivo Aragón le llevó a Zaragoza donde, tras anotar cinco tantos con el filial, llegó a ir convocado con el primer equipo.

Pareja de centrales

Coincidirá Rubio en el vestuario de El Collao con otro futbolista recién aterrizado en Alcoy procedente también de la capital aragonesa. Fernando Pajarero, central y capitán del CD Ebro en las últimas dos campañas, se convirtió el viernes en el primer fichaje del Alcoyano de cara a la próxima temporada.

El central, de 30 años, supera el 1’90 metros de altura y destaca por su contundencia y poderío físico. Capaz de adaptarse también a la posición de lateral derecho, Pajarero tiene experiencia más que contrastada en Segunda B, donde ha formado parte de equipos como Betis B, La Roda, Arandina y Ebro.

Compartirá el centro de la zaga alcoyanista con Tomás Ruso. Pese a que no es oficial todavía, el acuerdo entre las partes es un hecho y el central valenciano iniciará su tercera temporada en las filas del club blanquiazul. Más complicado lo tiene Mario Fuentes, que parece que pondrá fin a su etapa como jugador del CD Alcoyano cuatro temporadas después de su llegada.

Renovaciones

La defensa pasa por ser la línea mejor apuntalada hasta el momento por la comisión deportiva blanquiazul. Amén del fichaje de Pajarero y la próxima oficialización de la continuidad de Ruso, la retaguardia del Alcoyano tiene ocupada también sus flancos gracias a las renovaciones de sus dos laterales: Barreda y Navarro. El de Binéfar cumplirá su tercera campaña cabalgando la banda derecha de El Collao; para el de Novelda será su sexto curso consecutivo defendiendo el perfil izquierdo de la zaga alcoyanista.

La parte ofensiva de las bandas también cuenta con un miembro de excepción. Miguel Ángel Nieto prorrogó su vinculación con el Deportivo Alcoyano durante una temporada más. Llegado el último día del mercado de fichajes de invierno procedente del Hércules, el extremo madrileño fue fundamental para la consecución de la permanencia blanquiazul, gracias a firmar tres goles clave ante Elche, Peña Deportiva y Atlético Saguntino. Superado un año aciago lastrado por las lesiones, Nieto espera dar su mejor versión este curso en El Collao a las órdenes de Vicente Mir, que ya le dirigió en el club del Rico Pérez.

Incógnitas

Con todo, todavía quedan bastantes frentes abiertos que tiene que afrontar la secretaría técnica blanquiazul. El primero de ellos es el de Gato, que con Vicente Mir no dispuso de muchos minutos en su etapa en el Hércules y su continuidad en el Alcoyano es una incógnita.

En el mismo caso se encuentra Miguel Bañuz, a quien le seduce el interés del equipo de su ciudad, el Elche, si bien éste está supeditado a que los franjiverdes no logren el ascenso esta semana en Villarreal. Si consiguen el regreso al fútbol profesional, todo parece indicar que Bañuz estampará su firma y prorrogará su estadía en El Collao al menos una temporada más.

La comisión deportiva blanquiazul trabaja también por esclarecer el futuro de Cristian Galas. El polivalente zaguero gusta a los miembros de la secretaría técnica del Deportivo, que estarían encantados de volver a contar con el castellonense, bien nuevamente cedido por el Albacete o bien en propiedad, si consigue desvincularse del club manchego.

Los casos de Omgba y Eldin Hadzic son distintos. Con el camerunés cerca de recuperarse de la grave lesión de rodilla que le mantiene en el dique seco desde el mes de diciembre, parece que el club le ofrecerá la continuidad para la próxima campaña. El hispano-bosnio, por su parte, lastrado por sus continuos problemas físicos, también es del gusto de Vicente Mir, hecho que atestiguó en su presentación, y si consigue superarlos formará parte del plantel blanquiazul.