El Príncipe Felipe acogía el primer partido en el que su equipo se enfrentaba a un rival de nivel y confeccionado para estar arriba al final de temporada, que no es otro que el Moralo de Diego Merino. La afición verde sabía que era un partido importante y respondió a la llamada de su equipo, a pesar del intenso calor que hacía en la capital cacereña. Por su parte, la hinchada morala no dejó solo a su equipo y acompañaron a los suyos en este desplazamiento.

Cuando dos equipos que pelean para estar en la parte alta de la clasificación, la igualdad, a priori, estará presente en buena parte de la contienda. Así ocurrió en el Príncipe Felipe. Ambos equipos salieron al verde con la idea de no conceder oportunidades en los primeros minutos del encuentro, respetándose el uno al otro. Sería el Cacereño el que generaría más peligro conforme pasaban los minutos, ya que tuvo tres córner y una falta en poco tiempo, pero que tampoco pusieron en apuros a los de Navalmoral de la Mata. Para ver la ocasión más clara, hubo que esperar hasta el minuto 17, cuando Bernabé atajó un disparo de  Valentín, el cual aprovechó un desajuste de la defensa local.

Conforme pasaban los minutos, el Cacereño se encontraba incómodo sobre el verde, impreciso en los pases debido a la presión del Moralo y recurriendo constantemente a balones en largo que poco peligro generaban. Por el contrario, el Moralo se encontraba mejor que su rival, siendo capaces de salir con más éxito de la presión de los hombres de Adolfo Muñoz. Además, Valentín, que hasta el momento había tenido la más clara del partido, era un quebradero de cabeza para los verdes.

Ambos equipos seguían buscando el gol y los verdes la tuvieron en un remate de Eloy que acabó en las manos de Miguel López (41’). A los pocos minutos, el Moralo pudo haber conseguido su primer tanto, tras un remate que se le escapó de las manos a Bernabé y que tuvo que sacar su defensa de la línea de gol. Tras esto, el partido llegó al descanso con el resultado inicial de 0-0.

El Cacereño cambió tras el descanso

Tras la reanudación, el Cacereño salió con la idea de abrir la lata. Chechu, a los 4 minutos y Gustavo, con un disparo lejano, tuvieron sendas ocasiones de poner por delante a los suyos, pero el peligro se quedó en nada. En el 55’, Marcos Torres tuvo un buen centro en sus botas pero la defensa despejó a córner. Fue en este momento cuando la afición verde se vino arriba al darse cuenta de que su equipo estaba teniendo buenos minutos. Diego Merino, buscaba desequilibrar el partido de alguna forma, por lo que realizó el primer cambio. Entró el combativo Rulo en sustitución de Valentín, el mejor del Moralo. Ya en el 64’, fruto de esa constancia por ver puerta, el Cacereño consiguió adelantarse por medio de Neto. Este, tras pase de Marcos Torres, consiguió mandar el balón a las mallas y conseguir el que sería el tanto decisivo.

Tras esto, Diego Merino tuvo que volver a mover ficha debido a la lesión de su futbolista Lolo que fue sustituido por Cano. El cuadro visitante seguía buscando llegar a la meta defendida por Ángel Bernabé, como una falta que botó Yoni pero que rechazó la barrera local (35’). A los pocos minutos, el Cacereño pudo sentenciar debido a un fallo en la cesión de la defensa morala a su portero. Neto, aprovechó el error pero salvó el guardameta y Marcos Torres, en segunda instancia, tampoco pudo batir a Miguel López.

Ya en los minutos finales, el partido se puso bronco debido a un Moralo que empezó a cometer faltas, algunas de ellas muy agresivas, que poco gustaron a los de Adolfo Muñoz y todavía menos a su afición. Por ello, el árbitro buscó controlar el partido a base de tarjetas. Todavía hubo tiempo para más y Eloy mandó un disparo al palo. Renglón seguido, el Moralo pudo conseguir el empate por medio de Caramelo pero Bernabé estuvo providencial mandando el balón a córner. Tras esto, los de Diego Merino se quedaron con uno menos por la expulsión de Yoni tras ver la segunda amarilla. Adolfo Muñoz, para arañar algunos segundos al crono, dio entrada a Carlao en lugar de Rodri. Un Rodri, al que antes de ser sustituido, el árbitro le enseñó la amarilla y la posterior roja. Todo se trató de un fallo arbitral, ya que le mostró la segunda amarilla, cuando en verdad era la primera, pues no había sido amonestado previamente. 

Tras esto, el Cacereño continúa líder con  15 puntos de 15 jugados. Por su parte, el Moralo se coloca octavo tras esta derrota. 

Ya en rueda de prensa, Diego Merino declaraba que sentían “rabia e impotencia” porque habían hecho un “buen partido”. Reconoció que su idea era la de hacer “un partido largo” y se mostraba molesto por el resultado. A su vez, reconocía que el Cacereño es "un equipo diferente” por su “nivel físico” y por contar con “una velocidad superior respecto al resto de equipos de la categoría”. Por su parte, Adolfo Muñoz defendía que el partido transcurrió como ellos esperaban y que el equipo había sido “muy competitivo” y había “tirado de oficio”. Además, declaraba que era una victoria “sufrida pero merecida”.

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Sobre el autor
Álvaro Muriel Fernández
Estudiante del doble grado de periodismo y comunicación audiovisual en la Universidad Carlos de Madrid (UC3M).