Siempre que las estadísticas no acompañan a alguien se dice que están ahí para romperse. Pues bien, algo así sucede con el árbitro que la Real Federación Española de Fútbol designó para dirigir al Real Oviedo en su partido ante el Reus, el próximo domingo a las 18:00.

Se trata de Jorge Figueroa Vázquez. Pertenece al Comité Técnico de Árbitros de Andalucía y es el mayor, en edad, del colectivo de Segunda División. Punto a favor no sólo para el Real Oviedo sino para el desarrollo del partido en general, ya que la experiencia es un grado muy a tener en cuenta en el mundo del arbitraje.

A pesar de ello, el conjunto carbayón tiene que mejorar sus resultados con él, ya que de los siete encuentros que compartieron en el verde, el Real Oviedo tan sólo ha conseguido ganar uno de ellos, el que les enfrentó, en diciembre de 2017, a la Cultural y Deportiva Leonesa, que acabó con resultado de 3-0 a favor del equipo de Juan Antonio Anquela.

A Figueroa Vázquez, seguramente se le recordará en Oviedo por la desafortunada jugada ante el Mirandés, en la prorróga de la Copa del Rey de la 2015-2016, en la que su asistente nº 2 no vio un claro fuera de juego de Abdón Prats, que subió el 2-3 definitivo al marcador y apeaba a los azules de la competición del K. O.

La derrota en Huesca (4-0) y el empate ante el Zaragoza (0-0), a la temporada siguiente, dejaron claro que el andaluz no se lleva mucho la mano al bolsillo para mostrar cartulinas, o que si lo hace, tarda en hacerlo, como se pudo comprobar con la doble amonestación que le enseñó a Álvaro Ratón, meta maño, por una más que reiterada pérdida de tiempo. Desde luego, una expulsión que tenía que haber llegado antes del minuto 89 de partido.

Los datos más recientes de Figueroa Vázquez nos llevan al Metropolitano, estadio en el que el Real Oviedo perdió en el último minuto del partido ante el Rayo Majadahonda. En lo que va de campaña, sigue siguiendo su propio criterio. No parece que vaya a sobrepasar las 90 cartulinas este año, ya que lleva 33 en 8 partidos, y una expulsión, o lo que es lo mismo, unas cuatro por partido, un número escaso si lo comparamos con sus otros colegas de profesión.

La situación del Reus, tanto económica como deportiva, obliga al equipo a reaccionar si quiere evitar el descenso tanto deportivo -a Segunda B- como administrativo -a Tercera-, por lo que tendrán que salir con una marcha más el domingo si quieren evitar que el Real Oviedo se lleve los tres puntos, algo que, sumado a la intensidad de Anquela, le condicionará y mucho el partido a este trencilla andaluz.