El primer clásico de los tres que se disputarán en menos de un mes dejó a unos y otros con ganas de más. FC Barcelona y Real Madrid tendrán que decidir en la vuelta, que se disputará en el Santiago Bernabéu, quién de los dos estará en la final de Copa. En este choque que despierta el máximo interés en el panorama futbolístico a nivel mundial, se dispute en la competición que se dispute, están en juego mucho más que tres puntos, el pase a la siguiente ronda, o a la mismísima final.

Con el primer capitán y máximo valuarte del barcelonismo, Leo Messi, y Sergi Roberto, frecuentes en el once titular, esperando su oportunidad en el banquillo, Valverde sorprendía con la alineación de Malcom y Semedo para medirse al Real Madrid, en este primer encuentro.

La apetitosa eliminatoria de semifinal en la competición del KO tuvo un comienzo inesperado: un gol de Lucas Vázquez en el minuto 5 hacía que el Barcelona tuviese que remar contracorriente en su feudo. A pesar de los malos presagios, por el tempranero gol en contra y la imagen que dejaron los catalanes en la mayor parte del primer período, los de Valverde lograron recomponerse para salvarse al menos de la derrota y dejar abierta la eliminatoria. Fue Malcom quien firmó las tablas, minutos antes de retirarse con molestias físicas.

Lucas Vázquez sorprende

Comenzó mandando en la posesión el Real Madrid ante un Barcelona que parecía dormido y veía al conjunto blanco mover el cuero sin apenas interferir. Los blancos combinaron y superaron las líneas de centro del campo y defensa con cierta facilidad, inquietando a Ter Stegen desde los primeros compases. Vinicius condujó el cuero por la izquierda para dirigir un buen centro a Kroos, que disparó, forzando al cancerbero alemán a despejar con dificultad, dejando el balón aún suelto en el área.

No necesitaron mucho más los madrileños para hacerse con la ventaja: Benzema controló tras recibir de Vinicius, puso un centro atrás para el remate de Lucas Vázquez, y el gallego envió la bola al fondo de las mallas para firmar el 0-1. Tímidamente lo intentó el Barça tras una jugada de Jordi Alba, que combinó con Coutinho. El carioca buscó encarar, pero Varane acabó despejando el peligro.

Monólogo merengue

Continuaron mandando los hombres de Solari, que se anticipaban a los culés en prácticamente todas las acciones, apareciendo siempre por delante de su adversario. Los locales tenían dificultades para salir de la presión blanca y asentarse sobre un terreno de juego en el que no se acababan de encontrar cómodos. Fruto de este férrea presión, el Madrid conseguía hacerse con pelotas en zona de peligro una y otra vez. Muy caro pudo costarle a los azulgranas un error de Coutinho que cedió ante Benzemá en zona de medio campo, permitiendo al francés iniciar una contra que pudo causar mucho daño a los azulgranas.

Coutinho y Jordi Alba, durante un encuentro esta temporada | Foto: Noelia Déniz - VAVEL
Coutinho y Jordi Alba, durante un encuentro esta temporada | Foto: Noelia Déniz - VAVEL

Gracias también a un resbalón de Carvajal, recuperó después Busquets, que buscó a Luis Suárez y éste la dejó en bandeja para Malcom, que en el uno contra uno no tuvo la suficiente cabeza fría para aprovechar la mejor ocasión que había tenido el Barcelona hasta ese instante. El brasileño, que ya tuvo minutos ante el Valencia, se mostró muy irregular en el primer tiempo.

El Barcelona siguió encontrando dificultades para mejorar el ritmo, no alcanzó la regularidad ante el dominio de un Madrid que encontraba salidas constantemente. El balón parado dio alas a los culés, cuando Malcom ejecutó una falta después de una infracción de Marcelo. El brasileño sirvió el saque desde la derecha, colgó el cuero al área para el remate de cabeza de Piqué, que resultó en el primer saque de esquina favorable a los azulgranas.

El Barcelona despierta

Poco a poco el Barça fue metiéndose en el partido, al tiempo que el Madrid perdía las riendas del juego, que no la ventaja en el marcador, dónde seguía mandando. Malcom asistió a Semedo, que estaba esperando dentro del área y no encontró con quien conectar, decidiéndose por un chut que Varane despejó a córner.

El peligro para los barcelonistas llegó de nuevo a balón parado, en una falta que picó Malcom casi desde el mismo punto de origen que la anterior. Saltó Rakitic dentro del área para peinar, estrellando el cuero en la madera, en una buena ocasión para los catalanes. Luis Suárez, con un remate desde el borde de la media luna, puso en alerta a Navas, que despejó bajo palos. El de Costa Rica recogió después en sus manos y sin dificultad un disparo lejano de Coutinho.

Al Barça se le veía más fluido ya, quizá necesitado de un punto más de profundidad para acabar de hallarse, y generó situaciones de ventaja, mereciendo igualar, pero el resultado seguía congelado al descanso, favorable a los de la capital.

La primera ocasión para los culés en la reanudación llegó en los pies de Coutinho, que cargó desde fuera del área. El Camp Nou clamaba a Leo Messi, aún con más fuerza cuando veía a Arturo Vidal salir del banquillo a calentar, y el argentino continuaba a la sombra, aunque no tardaría en ejercitarse.

Malcom, que fue de menos a más en el partido, firmó el gol de la igualada

En una de las internadas de Jordi Alba por la banda llegó el tanto del empate. Rechazó Navas para negar al lateral izquierdo en el uno contra uno, quedando el balón suelto para el chut de Luis Suárez al palo, y el rebote le llegó a Malcom, que con un disparo certero puso las tablas.

Jordi Alba comenzó la jugada que dio origen al gol de Malcom | Foto: Noelia Déniz - VAVEL
Jordi Alba comenzó la jugada que dio origen al gol de Malcom | Foto: Noelia Déniz - VAVEL

Al fin Messi

Se produjeron los cambios, dos por cada bando: entraron de refresco Arturo Vidal, y el deseado Leo Messi, en lugar de Rakitic y Coutinho, por parte del Barcelona, mientras que en el Madrid entraban Casemiro y Bale en sustitución del lesionado Llorente y de Vinicius.

Se proponía así un partido distinto por parte de los azulgranas, que dispusieron de un lanzamiento de falta en una zona comprometida, desde dónde Leo Messi probó fortuna. El cuero se acabó perdiendo entre los numerosos hombres que compusieron la barrera madridista.

Malcom, autor de la diana culé, tuvo que retirarse con molestias físicas, dejando su lugar al canterano a Aleñá, para disputar el último cuarto de hora del clásico. El brasileño recibió el aplauso del Camp Nou, que agradeció su esfuerzo y una actuación que fue de menos a más en el partido.

En los últimos compases se vino arriba el Madrid. Por fortuna para los locales, reaccionó Ter Stegen ante Benzemá, salvando el segundo de los blancos. De inmediato se rearmó el Madrid, con un chut de Bale que tapó Semedo, enviando el balón a córner.

Los azulgranas también buscaron doblegar a su rival, en acciones que pudo solventar la zaga sin mayores dificultades. El resultado ya no se movió, dejando la eliminatoria completamente abierta para la vuelta, que se disputará el próximo 27 de febrero (21:00 hrs) en el estadio Santiago Bernabéu.