El próximo lunes, se cerrará la jornada número 25 de Liga. En Cataluña, el Girona, recibirá a la Real Sociedad. En su última fecha, los de Eusebio Sacristán Mena vienen de dar un golpe en la mesa ya que vencieron 1-2 al Real Madrid a domicilio con los goles de Cristhían Stuani (65') y Portu (75'), que le dieron la vuelta al tanto inicial de Casemiro (25'). Mientras tanto, el cuadro guipuzcoano igualó a cero en su visita al Estadio de Mestalla

Un esquema repetido

Respecto del fútbol que pregona el equipo catalán tácticamente los de la ciudad condal configuran un 5-3-2, modelo recurrente ya que equipos tales como el Rayo Vallecano, Leganés Sevilla también lo utilizan. Esta formación inicial de 3 centrales, dos carrileros largos, un pivote apoyado de dos interiores y la delantera, con la movilidad dentro del campo va mutando.  En lo que se remite a la línea de presión, los dos puntas (Stuani y Portu) son la línea más adelantada que conforman un dos versus dos contra la zaga rival.  Por detrás de ellos, Granell se coloca en el centro respalado a sus costados por los laterales-volantes en los costados que se encuentran en parejas con los jugadores de banda rivales. Más retrasados, los dos interiores (Pons-Álex García) aúnan fuerzas en un doble pivote. 

Sin embargo en caso de no surtir efecto positivo la presión, las líneas se comprimen para transformar ese 3-5-2 en un 5-3-2, con los ocasionales volantes a la altura del líbero y los dos stoppers. En una acción mancomunada, existe un mínimo resquicio entre la zona de defensa y de los centrocampistas, puesto que todos pasan por detrás del balón.

Foto: Noelia Déniz-VAVEL-.
Foto: Noelia Déniz-VAVEL-.

Retomando en cómo gestiona sus ataques, una de las cualidades de su sistema táctico es que no necesita de posesión para generar las situaciones. Por características, Portu suele tirarse a banda y Stuani permanece más estático como referencia de ataque. En tanto para generar la superioridad numérica a la hora de realizar sus embestidas, se conforman sociedades por los costados entre el lateral y el interior o el acompañamiento de Portu como atacante por fuera. Alternativamente, la versatilidad de este último le permite también culminar como nueve. En caso contrario, Aleix García se suma a la delantera.

Las espaldas, punto débil 

Una zona fructífera para sacar provecho de las falencias del Girona se encuentra a espaldas de los laterales, en el tercio superior con pases de los centrocampistas a la zona de los extremos quedando estos mano a mano frente al stopper siendo propensos al desborde. Ello, sumado al acompañamiento de un compañero resultan fatales para el defensa central puesto que se forma el 2-1 para la superioridad numérica. 

Foto: Noelia Déniz-VAVEL-.
Foto: Noelia Déniz-VAVEL-.

La carta filosa radica en los balones aéreos bajo los pies de Álex Granell que tiene una virtud para mover el cuero quieto o en movimiento ya sea para filtrar hacia el tercio superior o colocar el balón en el centro del área, aprovechando así la altura de jugadores como Stuani, una amenaza desde los remates de cabeza. Además, otra vía de encontrar al delantero charrúa es aprovechando el golpeo de balón de Granell para filtrar en el mano a mano ante el lateral rival y abastecerle con centros.