El Estadio Municipal de Ipurua y demás terrenos sobre los que han pisados las botas del conjunto armero no han visto nunca un mismo once a lo largo de la temporada.  José Luis Mendilibar ha decidido ser uno de los técnicos con mayor rotación dentro de sus filas ya que en 31 encuentros disputados se han dado cita 28 alineaciones diferentes.

El sinfín de bajas por lesiones han sido uno de los factores determinantes para que el bloque de futbolistas en el plan del Eibar sea uno de los más móviles de las tablas de la Primera División.

No obstante, Enrich, Cote, Diop, Orellana, Peña o Jordán han sido los ejes sobre los que han virado el resto de posiciones en el esquema de el de Zaldíbar.  Con más de una veintena de partidos compartidos, la pareja de Jordán y Diop se ha demostrado como la que más veces ha compartido titularidad sobre el césped.

El final de Liga se va acercando y los clubes están en el tiempo de descuento sobre el que realizar las tácticas de cara a asentarse en los puestos más altos de la tabla.  Sin embargo, la SD Eibar está a una buena distancia de lo que sería el puesto ideal entre los despachos eibarreses.

La defensa es uno de los grandes puntos débiles del equipo armero ya que las lesiones de Calavera, Anaitz Arbilla sumadas a las de Pedro Bigas han dejado la trasera del club sin ningún punto veterano de apoyo.  Oliveira y Álvarez parecen ser las dos mejores opciones con las que puede contar Mendilibar si lo que busca es para a un ataque de la Real que en Anoeta se hace fuerte.

Dos derrotas (contra el Valladolid en casa y con el Real Madrid como visitante), un empate frente al Levante en Valencia y una única victoria, cosechada frente a uno de los colistas de la tabla, el Rayo Vallecano lleva el Eibar guardadas en la mochila y con las que piensa en Anoeta, de cara a conseguir mejorar los resultados con los que cuenta a día de hoy.