Cuando comenzó a sonar el nombre de Adnan Januzaj en el mundo del fútbol, allá por 2013, se lo veía como la gran futura estrella del continente europeo. El nacido en Bruselas, de descendencia albano-kosovar, hizo su debut futbolístico en Manchester United y los ojos de los Red Devils brillaban tanto, que en su primera temporada marcó 4 tantos en 27 encuentros (asistió en 4 oportunidades). Tan bueno fueron sus comienzos que tres selecciones se pelearon por sus servicios: Albania, Kosovo y Bélgica, quien finalmente se quedó con el jugador.

Sin embargo, las siguientes temporadas no pudo mantener el rendimiento y esto lo llevó a ser cedido al Borussia Dortmund. Thomas Tuchel, por ese entonces entrenador del conjunto alemán, afirmó que no tenía lo suficiente para ser parte del primer equipo, por lo que tuvo que volver a Inglaterra debido a que no jugó lo suficiente como pretendía Van Gaal. Nuevamente, para conseguir minutos, fue cedido al Sunderland de David Moyes.

Todavía sin recuperar el nivel y con una lesión en el tobillo que lo marginó algunos partidos, volvió a Manchester y en julio del 2017, la Real Sociedad invierte 11 millones de euros por su pase confiando en el potencial que le puede dar al equipo.

En 2 años vistiendo la camiseta de la Txuri-urdin, el belga de 24 años tan solo disputó 65 partidos y marcó 6 goles. Aunque su estadía en San Sebastián tuvo más visitas al hospital: Apenas llevaba 2 meses y sufrió una lesión muscular; luego lo siguió ausencia por gripe; otra por una lesión en el muslo y, en dos oportunidades sufrió una lesión en la rodilla que lo tuvo a mal traer por 5 meses.

No obstante, Adnan confía en que la mejor versión de sí mismo se verá muy pronto y que la mejor decisión que tomó fue haberse quedado en el club para triunfar y demostrar lo que vale.