El Málaga CF se presentó en el Molinón con unos resultados que invitaban al optimismo. Las victorias ante Girona y Deportivo habían conseguido marcar la diferencia con el resto de candidatos al descenso, aunque con resultados en la jornada que hacían mantener esperanzas a los implicados en esta preciosa ( y angustiosa) carrera de fondo. 

Parte de esos resultados vienen también motivados por la estabilidad que ha generado la consolidación de los tres centrales en la zaga malaguista, que volvían a ponerse en liza en tierras asturianas. Sin embargo, los cambios de cartas a mitad de partida traen inconvenientes; como los que sufrió el conjunto malacitano ante un Sporting bastante serio

En el minuto 4 de partido, un fallo de concentración unido al desajuste de marca provocó la ruptura de ambas líneas por parte del talentoso Pedro Díaz, que asistía a Unai Medina para que éste definiera ante Munir por el primer palo ( primer palo, ya saben los puristas lo que suele decirse de encajar un gol por ahí). 

A partir de ahí, con la tranquilidad de adelantarse en el marcador y conscientes de la dificultad del Málaga CF en ataque el Sporting; que presentaba hasta cinco cambios respecto del partido anterior, se limitó a hacer correr al equipo malaguista mediante apoyos cortos y ofrecimientos continuos. Daba igual la situación, que siempre había alguien en quién apoyarse para dar salida al balón. Panorama negro ante un Málaga que ponía pundonor y ganas, pero sin acierto rematador en ninguno de los centros colgados desde, sobre todo, la banda derecha de Cifu.

Poco antes de la media hora de partido, y tras la lesión de Unai Medina en la enésima ruptura ocasionada por el conjunto Sportinguista llegó el segundo tanto de Álvaro; que definía en el mano a mano tras un balón largo de Nacho Méndez. Como un déja vu, se repetía una jugada que ya vimos en los tres partidos anteriores, con idéntico desajuste defensivo que habilita al delantero, pero con acierto esta vez del delantero. 2-0, y épica imposible a la vista. 

La segunda parte motivó el cambio en el esquema de los de Pellicer, dejando la defensa de cinco para mejores ocasiones. Esto motivó que el equipo pisara muchísimo más el área rival, teniendo en un disparo de Hicham la oportunidad más sería del conjunto costasoleño en el partido. 

El resto del encuentro se debatió entre el control del equipo local y las continuas intentonas de un equipo que adoptando un símil pugilístico, se convertía en el "sparring" perfecto: correoso, aguerrido, pero sin "punch". De hecho, al final conectó un directo a cargo del Albanés Keidi Baré tras un rebote de la defensa rojiblanca, que puso el 2-1 final en el marcador y quizás un clavo más en su ataúd futbolístico con una celebración que mostraba su disconformidad con las críticas recibidas. Muy lejos del propósito de enmienda, parece. 

Finalizó el encuentro poniendo al Málaga en una situación aún delicada, aunque dependiendo de sí mismo para certificar cuanto antes la permanencia y comenzar a trabajar ya de cara a la próxima temporada. 

Ficha Técnica:

Sporting de Gijón: Diego Mariño; Unai (Babin min.36), Molinero, Valiente, Damián; Murilo (Manu min.72), Javi Fuego, Pedro Díaz (Salvador min.72), Pablo Pérez (Gaspar min.36), Nacho Méndez (Berto min.90) y Álvaro Vázquez.

Málaga CF: Munir; Cifu, Lombán, Juande, Diego González (Cristo min.77); Hicham (Buenacasa 62), Benkhemassa (Tete Morente min.46), Luis Muñoz (Keidi Baré 54), Juankar (Adrían González 46); Juanpi y Sadiku.

Goles:1-0 Unai Medina (m.4) 2-0 Álvaro Vázquez (m. 31), 2-1 Keidi Baré (m .93)

Árbitro: Isidro Díaz de Mera ( Colegio Castellano-Manchego) Por parte del Sporting amonestó a Nacho Méndez (m.53), Javi Fuego (m.57). En el Málaga CF fue amonestado Keidi Baré (m. 79).