Para no perder el ritmo liguero, el equipo de Mauricio Pellegrino planificó para el día de ayer, miércoles, un “entrenamiento” contra un equipo cercano a la capital alavesa. Y el equipo elegido fue el Burgos CF, de segunda B, dirigido por el exentrenador alavesista Manix Mandiola.
Últimos encuentros del Burgos
Este entrenamiento llegó después de que el equipo burgalés hubiese encajado dos derrotas consecutivas, ante el Izarra de Estella (1-0) y el equipo asturiano del Lealtad de Villaviciosa(2-1).
El amistoso se disputó ayer a las 11.00 horas, a puerta cerrada y sirvió de preámbulo a una jornada clave, como lo son todas, pero especialmente esta, porque los blanquinegros solo están tres puntos por encima del descenso. Esta semana, el Burgos CF necesita volver a la senda de la victoria, a pesar de enfrentarse, el domingo a las 5 de la tarde, al Real Valladolid B, quinto clasificado y aspirante a los puestos de promoción, a falta de 8 jornadas para finalizar el campeonato.
Manix Mandiola no pudo contar con su jugador Razvan Popa, por haber sido llamado también por su selección rumana para disputar el partido contra Dinamarca, de cara al Mundial de Rusia de 2018.
Manix Mandiola
Manix sustituyó a Paco Fernández en el Burgos CF, destituido tras un arranque de liga desastroso, donde sólo consiguió 1 punto en los 6 primeros encuentros. El técnico vasco, ex jugador del propio Burgos, acumula una amplia experiencia en Segunda División y Segunda B. Nacido de Eibar hace 58 años, Mandiola comenzó su andadura como entrenador dirigiendo al filial del Eibar, con el que consiguió el ascenso a Segunda B en el 2000. Luego fue al Beasain y de ahí pasó al Real Unión, al que llegó a dirigir en Segunda División. También lo hizo dos campañas después con el Eibar, al que posteriormente regresó tras un efímero paso por el Alavés. Su último equipo ha sido el Tudelano, con el que el año pasado consiguió clasificarse para el play off de ascenso a Segunda.
Su etapa en el D. Alavés
El 23 de diciembre de 2008, Manix Mandiola fue elegido como entrenador del equipo albiazul por el consejo de administración alavesista, presidido por Fernando Ortiz de Zárate en pleno proceso concursal, para sustituir a José María Salmerón, tras la derrota en casa frente al Tenerife por 1-2. Era la temporada en la que en el equipo babazorro se encontraban jugadores de calidad, como Astudillo, Albácar, Calderón, Javi Guerra, Toni Moral, Óscar de Marcos y otros muchos, que no pudieron evitar el descenso del equipo al pozo de la segunda B. Apenas mes y medio después de ser contratado, fue cesado, debido a los malos resultados del equipo, tras perder 3-0 contra el Córdoba y colocar al equipo en puestos de descenso a segunda B. Sus pobres estadísticas, con un partido ganado y otro empatado, de los 6 que ha disputado el equipo bajo sus órdenes, precipitaron su sustitución. Javier López fue el elegido para enderezar el rumbo del equipo.
El encuentro de ayer
Centrándonos en el encuentro, el resultado era lo de menos en lo que se planteó desde las filas burgalesistas como un entrenamiento de calidad de cara al enfrentamiento liguero del próximo domingo frente al Real Valladolid B. Pero el cuerpo técnico que encabeza Manix Mandiola terminó contento con la actuación de sus pupilos en un choque que se jugó finalmente en un formato de tres periodos de 30 minutos de duración cada uno. El partido terminó con victoria alavesista por dos goles a cero, al término de los 90 minutos.
El preparador del Alavés lo había concebido como un ensayo sin luz ni taquígrafos para probar con ‘fuego real’ con una defensa de cinco efectivos. Esta situación se tradujo en que los vitorianos dejaron la iniciativa del juego al Burgos CF, que sobre todo durante los dos primeros ‘partidillos’ fueron dominadores de la pelota, pero sin generar acciones de peligro frente a un poderoso entramado defensivo.
En esta tesitura, los goles blanquiazules, obra de Edgar Méndez y el canterano Pau, llegaron en sendos contragolpes lanzados en el primer y segundo tiempo.
Como estaba previsto, y como también ocurrió en el bando visitante, Pellegrino repartió minutos entre todos sus efectivos, alternando los habituales que se habían quedado en Vitoria y varios jugadores del filial. En el equipo de Mandiola destacó el regreso al césped del ariete Adrián, que había estado al margen del grupo las dos últimas semanas por una pulbalgia. El canario jugó 30 minutos. También Prosi regresó al equipo tras perderse el último duelo liguero por sanción, disputando 60 minutos.
El único contratiempo del choque se produjo en el bando burgalés, ya que su jugador Chevi tuvo que abandonar el césped por unas molestias físicas, pero en principio no le impedirán llegar a tiempo para el choque del domingo.
En los dos primeros periodos, los dos equipos concentraron a sus efectivos habituales en las alineaciones, dejando el tercero para varios de los jugadores que han dispuesto de menos opciones y los más jóvenes.
En definitiva, un entrenamiento que sirvió a los dos equipos para intentar mejorar sus planteamientos de juego. El Deportivo Alavés jugó contra una defensa de cinco, pactada inicialmente por los entrenadores, y el equipo burgalés ensayó varias jugadas diferentes. Esperemos que el encuentro haya servido para acercar a ambos entrenadores a conseguir los fines propuestos.