El Atlético B venció por dos goles a cero a una Gimnástica de Torrelavega que no pareció tener opciones de meterse en la eliminatoria en casi ningún momento del partido. Los colchoneros firmaron un encuentro muy serio en el que a penas concedieron ocasiones y en el que vencieron gracias a las buenas actuaciones de Arona, Keidi, Cristian, Rubén o un Juan Moreno que resultó clave para cerrar el partido y no pasar apuros.

El ambiente en las gradas iba en consonancia con la importancia del partido. Las gradas del Cerro del Espino estaban muy pobladas tanto por la afición local como por la visitante y en los primeros minutos los rojiblancos no decepcionaron a los suyos: pasaba el tiempo y no solo no concedían ocasiones sino que dominaban el partido y dificultaban mucho la circulación de la Gimnástica con una presión adelantada que impedía que los cántabros se acercasen siquiera a las inmediaciones del área. Cuando lo hacían eran con centros que la zaga colchonera despejaba sin demasiados apuros.

En el Atlético, los ataques iban  por la banda derecha, con un Arona inspiradísimo, que siempre estaba en inferioridad ya que los visitantes concentraban sus ayudas defensivas ahí. El siete rojiblanco se las tenía que ver con dos y hasta tres jugadores de los de Torrelavega, pero aun así siempre generaba algo: bien un córner, bien una falta, bien un centro o bien conseguía combinar con alguien que llegaba desde atrás. De este modo llegaron ocasiones como un disparo de Cristian Rodríguez que sacó con dificultades un central de la Gimnástica. Además, cada vez que el Atleti metía un centro en el área, los cántabros lo sacaban con dificultades y la segunda jugada era también para los rojiblancos.

Pese a este dominio, los colchoneros no se relajaron en ningún momento y se llegó con el 0-0 al descanso. El resultado valía para que los locales estuviesen la temporada siguiente en 2ªB, pero la renta era mínima, lo que provocaba que la sensación de nervios no se disipase.

Recién empezada la segunda parte el Atleti recibió vio a lo que se exponía si no marcaba pronto y especulaba con la ventaja de la que disfrutaba: San Román tuvo que hace dos paradones  como respuesta a dos disparos del carrilero derecho de la Gimnástica. En estos primeros compases del segundo periodo la presión colchonera pareció disminuir, y los cántabros llegaban más arriba con el balón. Esto podría haber resultado peligroso, pero en la primera ocasión de contra que tuvo, el Atleti demostró que no iba a ser fácil quitarle el ascenso delante de su público: Zaka controló un balón escorado a la izquierda, se fue de su marcador, le dio el balón a Cristian, que iba por la izquierda, este dejó sentado a un defensa con un recorte y le regaló el balón a Keidi para que empujase el balón a placer. El filial colchonero acariciaba el ascenso.

Después del gol, la Gimnástica pareció perder la intensidad del arreón inicial y el Atlético creció en el partido, pudiendo incluso duplicar su ventaja. En esta ocasión, Juan Moreno, en el primer balón que tocaba después de sustituir a Arona, se encontró con el larguero. Minutos más tarde, sería un defensa quien sacaría el disparo del mostoleño, que venía precedido de una gran jugada de Rubén por la izquierda. 

Y a la tercera fue la vencida. Para dejar prácticamente sentenciado el ascenso, Juan Moreno hizo un gol de bella factura, con una vaselina por encima del portero después de una gran dejada de Zaka, que tanto los protagonistas del gol, como todo el banquillo y la afición rojiblanca celebró con rabia a sabiendas de que significaba acabar con la pesadilla de la Tercera División.

El partido terminó y la alegría estalló en el Cerro.Los jugadores agradecieron el apoyo a la afición, a la vez que esta les coreaba. Ahora está por ver quienes de estos jugadores está el año que viene en Segunda B y quienes no. El Atlético B comienza una nueva etapa con nuevas oportunidades. 

Foto: Daniel Nieto
Foto: Daniel Nieto