La hazaña que el Real Betis hizo la tarde del 20 de marzo de 1983 en Heliópolis, en su Estadio, y ante su afición, cobra aún mayor dimensión si se recuerda el rival y lo que consiguió éste en aquella temporada. El conjunto verdiblanco se enfrentaba en la jornada 29 de liga de la campaña 1982/1983 al Athletic Club de Bilbao. El conjunto vasco, que acabaría perdiendo por cinco goles a uno ante el conjunto de las trece barras, acabaría en la primera posición del campeonato liguero de aquel año, consiguiendo el título de campeón de la Primera División Española. 

Cinco goles del 'EuroBetis' al campeón de liga

Si se habla de la gran temporada del conjunto bilbaíno en aquella campaña, también se debe hablar de los buenos resultados que cosechó el Real Betis. El equipo bético acabaría el campeonato liguero en quinta posición, con lo que se clasificaba para la competición europea, con 38 puntos y un balance de 17 victorias, 4 empates y 13 derrotas. 

Antes del encuentro contra el Athletic de aquella temporada, el Betis venía de jugar dos choques nconsecutivos muy exigentes, ante el Real Madrid y ante el FC Barcelona, rivales contra los que cosechó el mismo resultado en ambos partidos: 1-1. 

Por otro lado, el Betis se enfrentaba al Athletic en el choque de vuelta, habiendo perdido en el de la ida 3-2 como visitante.

El partido se antojaba con la misma complejidad que los dos choques anteriores que había jugado el conjunto verdiblanco ante los merengues y los culés pero, sin embargo, en esta ocasión el Betis encontraría un partido mucho más cómodo y, sobre todo, un resultado muchísimo mejor.

La lucha por los puestos europeos venció a la lucha por el título de liga, ya que esas eran las peleas que cada equipo afrontaba al enfrentarse mutuamente.  

El equipo verdiblanco había apostado por su alineación más reconocible entonces: Esnaola en puerta; línea defensiva para Álex, Diego Rodríguez, Ortega y Parra; centro del campo para Canito, Casado, Cardeños y Rafael Gordillo; y arriba Poli Rincón y Peter Barnes. Del otro lado, el Athletic alineaba igualmente a su mejor once: Andoni Zubizarreta; Urquiaga, De La Fuente, Andoni Goikoetxea y Núñez; Liceranzu, Ismael Urtubi, De Andrés, Manuel Sarabia; Argote y Dani.

Un Betis dominador de principio a fin

Y es que, el partido se le puso muy de cara al Betis desde el comienzo. En el minuto 6, el Athletic se encajaba un gol en propia puerta por mediación de Liceranzu. Y a partir de ahí, el conjunto verdiblanco siempre llevó la batuta del juego. 

Antes de llegar a la primera media hora de partido, Arminio Victorian Sánchez, colegiado del encuentro, señalaba penalti en el área del Athletic. Sería Julio Cardeñosa, desde los once metros, el encargado de subir el segundo gol al marcador para poner el dos a cero. 

El conjunto vasco se vio muy afectado por los dos goles tan tempraneros del Betis y le costó mucho reorganizarse para buscar el empate o la remontada. Por ello, siempre hubo la sensación de que el el Athletic iba a remolque de los verdiblancos. 

La posición más aventajada en liga de los bilbaínos no se hizo palpable en el verde, donde no se vieron más goles hasta el segundo tiempo. 

Cinco minutos después del cuarto gol bético, llegaría el quinto, obra de nuevo de Poli RincónAl comienzo de éste, el Athletic trató de cambiar la dinámica del encuentro y poner el juego a su favor, pero de nuevo, un gol tempranero tras la reanudación (en el minuto 52 de partido), obra de Poli Rincón, colocaba el tercero y acrecentaba la ventaja para los de Heliópolis. 

No hubo reacción del Athletic que con cada golpe recibido se venía más atrás. No tardaría de esta forma en llegar el cuarto de la tarde para el Betis: Antonio Parra, en el minuto 66, hacía el cuarto y dejaba definitivamente el partido resuelto para los intereses de los suyos. 

Y a pesar de todo esto, hubo tiempo de más goles. Cinco minutos después del cuarto gol bético, llegaría el quinto, obra de nuevo de Poli Rincón que certificaba su doblete. El Estadio de Heliópolis era una fiesta y el Betis disfrutaba con su juego y sus goles. Pareció por momentos que la goleada pudo ser incluso mayor, pero un golpe de orgullo del Athletic llevó al gol de Noriega, que maquilló un resultado que no obstante, ya estaba listo para sentencia. 

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Sobre el autor
Francis Alonso García
Comunicación Audiovisual en la Universidad de Sevilla.