El Alcorcón empezó el partido creando peligro, fue mediante un córner en el primer minuto de juego, una circunstancia recurrente durante toda la primera parte. El cuadro madrileño se mantuvo incisivo y su primera gran ocasión la tuvo David Navarro mediante un cabezazo a los diez minutos. Los amarillos proyectaban mayor sensación de peligro a la vez que su intensidad dejaba por el campo una larga sucesión de faltas, una “táctica” a la que se sumó el Levante. Y precisamente una falta en el minuto 23 cometida por Toño, esta dentro del área, se convirtió en penalti a favor del Alcorcón. Además el lateral diestro levantinista vio tarjeta amarilla por la acción. El encargado de lanzar la pena máxima fue David Rodríguez, que logró adelantar a su equipo mediante un certero disparo a la escuadra derecha de Raúl Fernández.

El partido siguió caracterizado por la hiperactividad y eso fue dejando nuevos damnificados en forma de más tarjetas; en el minuto 28, tanto el otro lateral granota, Pedro López, como el local Daniel Toribio vieron cartulina. Un minuto después Casadesús sustituyó a Insa: seguramente Muñiz buscaba con el cambio sumar más efectivos ofensivos y tratar de revertir la situación lo antes posible. Pero un córner fue apenas lo que aportaron en ataque sus pupilos durante lo que quedaba de mitad. El Alcorcón, por su parte, botó una serie mayor de saques de esquina, y precisamente a raíz de uno de ellos logró su segundo tanto, un gol, eso sí, que vino motivado por la desafortunada actuación de Sergio Postigo, que fue quien introdujo definitivamente el balón en su portería. Los últimos minutos se caracterizaron, lejos de la opción natural de proteger su enorme botín, por el deseo amarillo de incrementarlo; y solo los fueras de juego considerados por el colegiado y sus asistentes lo impidieron, pues algunos de ellos eran jugadas que hubieran podido hacer mucho daño al Levante, para el que el pitido que indicaba el descanso fue una bendición.   

El Levante tiró de orgullo y tuvo ocasiones para empatar

En la segunda parte fue el equipo del Ciutat de València el que lo inició creando peligro, primero con un temprano saque de esquina y después con una clara ocasión que desbarató Dmitrovic bajo palos tras un remate con la derecha de Casadesús, aprovechando una excelente asistencia de Morales. Esta jugada resultó un punto de inflexión, pues el equipo local reaccionó y empezó a crear también ocasiones claras, una de ellas acabó con un remate al larguero de Owona. Luego fue el turno de Roger (de nuevo a pase de Morales), que volvió a obligar al portero local a evitar in extremis el gol. A continuación le tocó a David Rodríguez, merced a un buen pase de Bellvis.

Rubén González sustituyó a Pedro López; era el tercer y último cambio de Muñiz, quien había introducido a Verza por Lerma antes de comenzar la segunda mitad. En este punto el partido reproducía un guión ya conocido: muchas faltas que trababan el partido. En una de ellas vio tarjeta amarilla David Navarro. Y en la línea ya citada de intercambio de roles entre mitades sería el equipo granota, en el minuto 66, el que tuvo el gol en los pies de Rubén García tras un pase, otro más, de Morales. Su disparo, a la izquierda del portero, se marchó ligeramente desviado. Entonces vino el turno de los cambios para el Alcorcón: Pablo Pérez ingresó en el campo en detrimento de Óscar Plano. Posteriormente sería Tropi quien sustituyera Víctor Pérez.

El Levante tuvo otra buena oportunidad de recortar diferencias a través de Verza, quien remató alto y desviado. Poco después la mala suerte volvió a presentársele al equipo, esta vez manifestándose como lesión, en concreto de Campaña. El equipo valenciano, por lo tanto, acabaría el partido con diez, dado que había agotado los cambios reglamentarios. Luego serían los locales quienes tuvieron la oportunidad de dinamitar el encuentro con Kadir, pero el centrocampista del Alcorcón remató alto con la zurda desde el centro del área. Nada más destacable dejó el choque, a pesar del convencional descuento de tres minutos que Pérez Pallas decidió reproducir.