La temporada de Isco Alarcón no ha sido la esperada, puesto que el jugador sigue sin ser lo determinante que se espera de él en los tres cuartos de campo. Son ya dos temporadas y media e Isco no ha terminado de encontrar su sitio en el equipo. Su fútbol no se adecua a un rol concreto dentro del equipo, y el jugador no está teniendo sus mejores momentos, ya se a por las exigencias de sus técnicos o por la irregularidad de sus actuaciones.

Lo mejor y lo peor en la época Benítez

De los primeros catorce partidos disputados Isco jugó más de 65 minutos en doce de ellos, seis de ellos completos

La llegada del técnico madrileño las cosas cambiaban para Isco. Se esperaba que el malagueño tuviese mayor peso en el equipo. Y así fue durante casi la primera parte de la temporada. De los primeros catorce partidos disputados Isco jugó más de 65 minutos en doce de ellos, seis de ellos completos.

Pocas semanas después llegaban las dolorosas derrotas que provocaron no sólo la marcha del madrileño, sino que algunos jugadores, entre ellos Isco, quedaran señalados como culpables del declive blanco. Entre ellas ante el Barcelona, donde fue expulsado a los poco más de 20 minutos de juego disputados.

2015 se cerraba con un Isco desconocido. Sus caras en el banquillo no gustaron nada a Benítez, castigándole sin tomar parte en los dos últimos encuentros del año ante Rayo Vallecano y Real Sociedad. 

Zidane y vuelta a la irregularidad

La llegada de Zidane cambió a todo el equipo. Y esto también afecto a Isco. El de Benalmadena pasó a ser indiscutible tras estar alejado del césped.

Su buen momento coincidía con la lesión de Bale. Zidane se vio en la tesitura de elegir entre Isco y James y aunque el español partía con la desventaja de haber sido suplente, fue cogiendo protagonismo y haciendose con minutos por encima del colombiano. El de Benalmadena consiguió la confianza de Zidane.

Pero las irregularidades seguían y el jugador tenía partidos muy buenos y otros en los que pasaba totalmente desapercibido. Zidane apostaba en la recta final por un once más defensivo, con Casemiro en el centro del campo, lo que adelantaba a Modric y Kroos. Este cambio dejaba de nuevo a Isco en el banquillo de inicio, aunque si era una de las primeras opciones para Zidane. 

Del Bosque le dejaba fuera de la convocatoria de la Eurocopa

La final fue para Isco, que salió en el minuto 72 del partido, sin mucho que hacer con un juego que pasó bastante desapercibido. La temporada se cerraba de la peor manera posible, pues Del Bosque le dejaba fuera de la convocatoria de la Eurocopa, haciendo que Isco se plantee su futuro en el Madrid si quiere estar en el Mundial.