Esteban Andrés Suárez, hasta esta temporada portero y capitán de la Unión Deportiva Almería, ha dado por finalizada su etapa en el conjunto andaluz tras haber anunciado el retorno al club de sus amores, el Real Oviedo. Una etapa que se ha prolongado en el tiempo por seis años en los que su aportación al equipo ha ido aumentando progresivamente, en los que se ha ganado el respeto de compañeros, rivales, entrenadores y afición. Seis años que han dejado un bagaje de tres temporadas en Primera, un descenso a Segunda División, un ascenso y una permanencia en la máxima categoría del fútbol español que ha sido trabajada y peleada hasta el último segundo.

11 meses que se han acabado convirtiendo en seis años

Esteban aterrizó en Almería procedente de Vigo en la temporada 2008/2009. La marcha de Cobeño dejaba una vacante en la portería almeriensista que iba a ser ocupada por el arquero asturiano, que sería suplente de Diego Alves hasta la marcha del meta brasileño al Valencia tras consumarse el descenso del Almería a Segunda División en la temporada 2010/2011.

El veterano cancerbero firmaba un contrato que, a priori, expiraría al fin de la citada campaña, pero su buen hacer y su veteranía hicieron que la directiva encabezada por Alfonso García apostara por él y le fuera renovando año tras año hasta llegar a cumplir seis temporadas como rojiblanco.

Tres temporadas a la sombra de Diego Alves

Con la meta almeriense custodiada y defendida por Diego Alves, que siempre fue parte fundamental en los esquemas de los entrenadores que fueron pasando por Almería, la titularidad de Esteban se antojaba difícil y sus presencia en el once no iba más allá de los partidos de Copa del Rey y de actuaciones esporádicas en la competición doméstica.

En esas tres primeras campañas en Almería, Esteban obtuvo un bagaje de 28 partidos jugados, a caballo entre Copa y Liga, sumando un total de 2520 minutos disputados.

Se hace con la titularidad en Segunda

Con el fichaje de Diego Alves por el Valencia y tras haberse consumado el descenso de categoría del equipo rojiblanco en una fatídica temporada, Esteban tomaba las riendas de la portería de la Unión Deportiva Almería, y lo hacía con el firme propósito de devolver al cuadro andaluz a la élite del balompié español.

El meta asturiano iba adquiriendo galones y su papel tanto dentro como fuera del terreno de juego encandilaba a una afición que se encomendaba al buen hacer del exjugador del Celta para volver a Primera División.

En la temporada 2011/2012, Esteban fue de la partida las 42 jornadas que conformaban la Liga Adelante, llegando a sumar un total de 3780 minutos disputados, superando con creces los números obtenidos en sus tres primeras campañas en el conjunto almeriense.

Sin embargo, el objetivo del ascenso no se logró y el Almería, tras un final de temporada nefasto no llegó siquiera a disputar los playoffs que daban acceso a la Liga BBVA y se vio abocado, un año más, al infierno de la Segunda División.

El año del ascenso, el de su consagración

Después de una temporada decepcionante, el Almería encaraba un nuevo año con el claro objetivo de retornar a la Liga de las estrellas, como así se hizo saber desde un principio a través de todos los estamentos del club. Almería y el Almería necesitaban ese ascenso.

La temporada iba a ser larga. Tras estar todo el año en la parte alta de la tabla clasificatoria, un final de competición titubeante hacía presagiar lo peor a la parroquia rojiblanca. Pero el equipo supo reponerse y, tras cuatro victorias consecutivas, el conjunto entrenado entonces por Javi Gracia llegó a la última jornada de Liga necesitando una victoria para poder ascender de forma directa.

No fue así, y el Almería tuvo que afrontar unos playoffs que le acabarían devolviendo, esta vez sí, a la máxima categoría del fútbol español.

La Unión Deportiva Almería completaba así una temporada en la que había disputado un total de 46 partidos, en todos ellos con Esteban bajo palos, que cobraría de esta manera un mayor protagonismo en la consecución del ascenso del cuadro andaluz.

Fundamental en Segunda, fundamental en Primera

El Almería volvía a Primera y lo hacía bajo las órdenes del debutante Francisco. El míster almeriense otorgaba la responsabilidad de defender la portería rojiblanca, de nuevo, a Esteban que relegaría a un segundo plano a Óscar Ustari, quien tuvo que buscarse una salida en el mercado invernal debido a la falta de oportunidades.

Esteban, a sus 38 años, se mostraba intratable y se hacía dueño y señor de la portería almeriense por tercer año consecutivo. El guardameta asturiano, que ha jugado los 38 partidos de la competición liguera en su totalidad, ha sido uno de los mayores responsables de la permanencia conseguida por los de Francisco.

Despedida por todo lo alto

Todo principio tiene un final. Los caminos de Esteban y la Unión Deportiva Almería se separan tras seis temporadas en las que el guardameta lo ha dado todo por el club y por la ciudad y así se le reconoció con un sentido homenaje una vez cosechada la permanencia en la Liga BBVA ante el Athletic Club. Ahora regresa al equipo de sus amores, el Real Oviedo, para dar por finalizada una trayectoria ejemplar y llena de éxitos, en la que ha dejado huella allá donde ha estado.

Seis temporadas, 154 partidos y 6673 minutos después, Esteban y la Unión Deportiva Almería no se dicen adiós, se dicen hasta luego.

Foto 1: UD Almería.

Fotos 2 y 3: Marca.

Foto 4: Antonio L. Juárez.