Desde que en 2012 desembarcara en la NFL siendo seleccionado por los Seattle Seahawks en tercera ronda con el pick 75 del Draft, Russell Wilson se ha convertido en uno de los quarterbacks más a tener en cuenta de toda la NFL. En su sexta campaña con el equipo de Seattle, Wilson está ejerciendo el papel de líder de equipo con el costoso objetivo que representa en la NFC la clasificación para los playoffs

No muchos quarterbacks son capaces de liderar un equipo guiándolo hacía playoffs de la forma en que lo está haciendo Wilson, luchando contra el problema de las infracciones y teniendo delante a una línea ofensiva que deja contra las cuerdas a su quarterback, como la de Seahawks. Las líneas ofensivas son una de las grandes olvidadas a la hora de valorar el rendimiento de un equipo, pero son uno de los elementos fundamentales para el ataque de la NFL, de ella depende la protección física y mental del propio quarterback. Los fallos de la línea ofensiva se traducen en golpes y sacks físicos para su quarterback, así como una posible disminución de la capacidad de su juego ante el temor de posibles golpes y lesiones.

Russel Wilson se ha convertido desde su llegada a la NFL en el quarterback que más hits y sacks ha recibido durante estas 6 temporadas, dicha situación no es nada fácil de aguantar para un quarterback, por ello, el tipo de reacción que muestre al respecto será lo que lo catalogue como un quarterback común o uno élite. Wilson ha dejado claro que forma parte del grupo de quarterbacks élite, para ello ha tenido que adaptarse a las circunstancias viéndose obligado a buscar respuestas que permitan fluir su juego más allá de recibir golpes y sacks en el pocket

Buena cuenta de ello es su capacidad de juego fuera del pocket, que ha ido desarrollando con el paso del tiempo. Wilson, como si del propio  Harry Houdini se tratase, muestra una capacidad de escape ante las defensivas rivales que muy pocos quarterbacks cuentan con ella, si a ello le sumamos la gran capacidad de ejecutar pases en movimiento, obtenemos a uno de los mejores quarterbacks de toda la NFL fuera del pocket.

Los números corroboran su gran papel de juego fuera del pocket, Wilson con 821, es el quarterback que más pases ha realizado, se coloca como el cuarto quarterback con mejor rating fuera del pocket con un 91,3 y es con 33, el segundo quarterback que más touchdowns ha conseguido, superado únicamente por Aaron Rodgers con 44.

Los Seahawks tienen en Russell Wilson al quarterback perfecto para su juego, alguien capaz de cubrir las carencias de su ofensiva, que conoce en profundidad el sistema de Pete Carroll y cuenta con una libertad a la hora de ejecutar el juego que muy pocos tienen.