Todos conocemos aquella leyenda que dice "los pateadores y las defensas ganan campeonatos". Pero nunca fue tan cierta como en este juego por el cetro de la NFC, y Greg Zuerlein fue el protagonista de esto.
Con siete temporadas en la NFL, nunca antes había estado en los Playoffs, y vaya debut que está teniendo. Estuvo cuando lo llamaron ante los Cowboys y fue clave en su segundo partido de postemporada enfrentando a los Saints.
En el partido Divisional, Zuerlein tuvo una efectividad de 4-3 ante Dallas, y su acierto de mayor distancia fue de 44 yardas.
Pero en esta final de conferencia, el egresado de la Universidad de Missouri Western State, estuvo perfecto acertando a los dos palos y fue un factor determinante en la victoria de Los Rams ante New Orleans en búsqueda del titulo de conferencia de la NFC y la clasificación a la Super Bowl.
En el segundo cuarto, cuando el partido parecía cuesta abajo (perdían 13 a 0) convirtió un gol de campo de 36 yardas que le permitió a los Rams meterse en partido.
Cuando quedaban poco más de cinco minutos del cuarto periodo, el veterano pateador, conectó otro FG. Esta vez de 24 yardas.
Y con sólo 15 segundos para que concluyera el tiempo regular, Zuerlein mostró su jerarquía y embocó otro. Pero de 48 yardas, y en medio de un ambiente sumamente hostil y ensordecedor. Este sirvió para mandar el partido a tiempo extra cuando parecía imposible pensarlo.
Pero su momento de la tarde vino unos minutos después. Los Saints no aprovecharon su posesión y Drew Brees fue interceptado.
Llegó el turno de los Rams en el tiempo extra, y ellos si lo aprovecharon. Consiguieron llegar a zona de gol de campo.
Se trataba de un intento de 57 yardas para Zuerlein, y en caso de acertarlo, sacaban boleto a Atlanta para definir el SB LIII. Y pese a que la distancia no era la ideal, la patada tuvo tanta fuerza que le sobró pierna. Mucha pierna.
Greg superó la distancia, el entorno, los nervios y fue el MVP de Los Rams para jugar un Super Bowl por cuarta vez en la historia de la franquicia.