Uno de los defensas más duros y contra el que ningún delantero se deseaba enfrentar pone fin a su carrera después de 15 años en la NHL. Niklas Kronwall, drafteado en la posición 29 del draft del 2000, se convirtió en uno de los iconos de la franquicia de Detroit, que ahora pasa por un profundo período de reconstrucción.
Después de 953 partidos, el sueco deja la liga con una Stanley Cup y posiblemente el mejor vídeo de highlights que se pueda ver sobre cualquier jugador de la NHL, debido a la intensidad y al nivel con el que sembraba el terror a los atacantes rivales con sus golpes. Aún así Kronwall no se desmarcará en absoluto de la franquicia que le ha visto crecer y triunfar ya que que se ha convertido en el nuevo asesor de la oficina del Manager General Steve Yzerman.
La carrera de Kronwall ha concluido con 80 goles y 350 asistencias en temporada regular, mientras que en los 109 partidos de playoffs sumó cinco goles y 42 asistencias. Niklas Kronwall también ha tenido una exitosa carrera más allá de los Red Wings, ya que con la selección sueca ha conseguido una medalla de oro en los Juegos Olímpicos en 2006 y otra de plata en 2014 en Sochi.
Preguntado por su recuerdo más preciado en las filas del equipo que le ha visto dominar la liga en defensa durante muchas temporadas, pone por encima de todo la final que en 2008 consiguió ganar frente a los Pittsburgh Penguins en los que Crosby, Malkin o Fleury ya iban dejando una buena muestra de lo que serían. Kronwall siente lástima cuando piensa que no volverá a una situación como esa, pero en la rueda de prensa de su despedida aseguró que conseguirá volver a poner a Detroit en el sitio que se merece.