Aterrizó en la categoría reina con un sueño: ser campeón. Y su ambición, la misma que le llevó a conseguirlo, en esta ocasión va más allá: Jorge Lorenzo quiere hacer historia. Aunque ya la ha hecho. Muy pocos, poquísimos, son los afortunados que pueden grabar su nombre en la historia de la categoría reina, y presumir de tener un título que le acredite como Campeón del Mundo de MotoGP. Y no uno, sino hasta tres, son los que el balear guarda en sus vitrinas. Pero Jorge siempre quiere más. Nunca fue de conformarse, es más, siempre ha intentado ir un paso más allá para encontrar una perfección tan exacta e imposible, como lo es su forma de pilotar arriba de una moto.

Fiel a su estilo y sobre todo, a él mismo. Así es el balear, que no tiene otra intención más que la de entrar a formar parte de un club selecto en el que hasta día de hoy, solo están escritos los nombres de cinco pilotos. Y de esta forma, siendo él el sexto, quiere cerrar su carrera. Tras nueve años bajo el seno de Yamaha, equipo con el que aterrizó en MotoGP, el espartano ha puesto rumbo a Ducati con la intención de convertirse en uno de esos selectos pilotos, que han conseguido ganar con dos motos distinas en la categoría reina. El español, tiene todo un reto por delante pero su ambición, sin duda seguirá siendo mucho mayor que todas las dificultades que puedan surgir en el camino.

Jorge Lorenzo durante los test de Qatar | Foto: Ducati Corse

Empezar desde cero

El camino no ha cambiado, pero a Jorge le toca estrenar zapatos y tal vez, no sean de su talla. Su decisión, tan bonita como peligrosa, tan apasionante como aterradora, abarca dos extremos: todo o nada. Y si no, que le pregunten a Valentino Rossi. El italiano, también puso rumbo a Ducati con la intención de convertirse en Campeón del Mundo bajo el seno de la escudería italiana pero su misión, fue imposible. Los resultados del italiano, lejos estaban de ser propios de un campeón de su nivel y quizás, esto, también le pueda ocurrir al español. Aunque en estos momentos, no parece ser lo que más le preocupe.

El espartano, quiere volver a sentirse vivo y por seguro, tiene claro que no quiere caer en una rutina que le lleve a perder esa pasión por lo que hace y lucha día a día. Y este, puede ser el motivo que le haya llevado a hacer borrón y cuenta nueva. Como un niño. No solo por volver a sentirse así sino también, por el proceso que ha de llevar a cabo para intentar triunfar con la Desmosedici, una moto potente pero cuanto menos, complicada. Para seguir recorriendo el camino, le toca aprender a andar de una forma nueva. Esto, no quiere decir que deba olvidar todo lo recorrido en él y la forma en la que lo ha hecho pero sí, que ha de ir adaptándose a una serie de situaciones  que sumándolas entre sí, le lleven a ir mejorando junto al paso del tiempo hasta que esté listo para volver a ganar. 

Realista por encima de todo

Jorge tiene claro su objetivo, pero también su realidad. Lejos de querer ocultar su situación, el balear se ha mostrado cauto y tirando de realismo en todo  momento sabe muy bien en que lugar se encuentra, cual es su potencial y hasta donde puede llegar en su situación actual. 

Jorge Lorenzo durante los test de Phillip Island | Foto: Ducati Corse

El piloto de Ducati, está teniendo más problemas de los que pensaba en su adaptación a la Desmosedici y él mismo reconoció que probablemente, esta adaptación va a requerir un proceso más largo de lo que él imaginaba en un principio. Con los resultados en la mano y la pretemporada terminada, ni la fábrica italiana ni él se ven luchando por el título esta temporada pero sí, creen que van por el camino adecuado y como muestra, los entrenamientos de Qatar.  En un circuito favorable para las Ducati, el español no terminó muy lejos de la cabeza e incluso tras su actuación, se llegó a especular con un posible podio que él, no ve tan factible. Su progreso está, aunque por el momento, cree que no es suficiente ya que sobre la moto, se encuentra al setenta por ciento de su potencial.

Desde Ducati confían en él

El máximo valedor en Borgo Panigale, Gigi Dall'Igna, mostró en una entrevista a Movistar MotoGP todo su apoyo hacia el balear: "Fichamos a Jorge para pelear por el Mundial. Está claro que en este momento no estamos listos para hacerlo, pero tenemos soluciones para reducir los problemas y dependerá de lo bien que lo hagamos y de la velocidad que tengamos para poner en pista esas soluciones"

"Creo que lograremos llegar a tiempo para que pueda exprimir todas las cualidades de nuestra moto e intentaremos reducir los aspectos negativos”, añadía. 

Respecto a la labor del español en el equipo, Dall'Igna resaltó que el trabajo que está llevando a cabo, es difícil ya que "cambiar de moto es complicado, sobre todo si has estado siempre con la misma, como es su caso, y que ha estado siempre con las mismas personas". 

Jorge Lorenzo rodando en Sepang | Foto: Ducati Corse

La nueva andadura de Jorge Lorenzo en la categoría reina no ha hecho más que comenzar. La pretemporada, ha sido un pequeño aperitivo  al que quién sabe si le seguirá un banquete excelente o si por el contrario, mantendrá la tónica del invierno. Lo único que está por seguro, es que hablar de Jorge Lorenzo, es hacerlo de un piloto al que le va lo difícil, lo imposible. El próximo 26 de marzo, los focos de Qatar volverán a iluminar la vuelta de una nueva temporada. Hasta entonces, solo queda esperar.