La temporada 2017 ha sido la mejor hasta la fecha para el italiano Romano Fenati. De las seis que lleva en la categoría pequeña del mundial, no ha sido hasta este curso cuando ha logrado poner el broche final a su etapa en Moto3 cerrando el año como subcampeón de la categoría. Con un total de 248 puntos, el piloto de Ascoli Piceno ha terminado segundo de la clasificación general después de haber conseguido tres victorias y ocho podios.

Temporada dentro del top ten

En general ha sido una temporada regular dentro del top ten para el italiano. Exceptuando un decimotercer puesto en Italia y otro en Australia, además de la caída que sufrió en el GP de Francia, Fenati ha oscilado entre los primeros puestos de cabeza siempre que ha acabado fuera del podio.

Tras comenzar sin destacar excesivamente en la cita inaugural en Qatar, donde terminó quinto, poco tardaría el italiano en cogerle el gusto a subir al podio. Austin fue el escenario de la primera victoria, antes de abordar la gira europea, donde el espectáculo ofrecido por un piloto veterano y con experiencia alcanzaría su punto álgido. Después de terminar en segunda posición en el GP de España, Romano encaró sus peores momentos de la temporada, yéndose al suelo en Francia y firmando una decimotercera posición en el GP de casa, Italia. Sin embargo, esto sería precisamente el golpe de motivación que le llevaría a lo más alto de su carrera mundialista, viéndose más cerca que nunca de la gloria en la lucha por el título. Fenati encadenó tres podios consecutivos antes del parón de verano (Cataluña, Países Bajos y Alemania) y volvió a redimirse en la primera cita de la segunda mitad de la temporada, cerrando el GP de República Checa con otro segundo puesto.

A pesar de mantenerse en el top ten en cuanto a resultados durante todo el año, sí que sufrió una racha más irregular hacia la segunda mitad de campeonato. Con el éxito cosechado en las últimas carreras aún palpable, Fenati mostró un bajón de rendimiento en los GP de Austria y Gran Bretaña que se tradujo en una decimotercera y séptima posición respectivamente, igualando el resultado obtenido en Mugello y firmando nuevamente su peor resultado de la temporada. Los triunfos de la primera mitad se volvieron de pronto un espejismo para el piloto del Marinelli Rivacold, que a excepción de las dos victorias conseguidas en San Marino y Japón, se vio sumido en una racha de resultados mediocres en los que lo mejor que pudo hacer fue una sexta posición. En la última carrera de la temporada en Valencia, con el título más que decidido, logró firmar un cuarto puesto que sirvió para despejar las lacras de esta segunda mitad y dejar un sabor agradable a una temporada que supuso mucho más que una temporada cualquiera: el subcampeonato del mundo de una categoría en la que ha trabajado y luchado durante años antes de dar el salto definitivo a Moto2, clase de la paciencia y experiencia.

Lo mejor: las cuatro fantásticas

El mejor momento de la temporada para Romano Fenati llegó a mitad del curso a modo de nexo ilusorio entre dos etapas marcadas por la mediocridad y resultados poco satisfactorios. El piloto de Ascoli Piceno encadenó cuatro podios consecutivos durante la gira europea que se prolongaron desde el GP de Cataluña hasta la cita en Brno, con parón veraniego incluido. El italiano logró seguir la estela de Mir durante cuatro carreras que le acercaron al edén más de lo que había estado nunca en las cinco largas temporadas que ya llevaba a su espalda en la categoría pequeña del mundial.

Lo peor: un final agridulce

Tras el gran resultado obtenido en Brno se produjo un contraste estrepitoso para el italiano. La decimotercera posición conseguida en Brno vaticinaba la que iba a ser la peor parte de la temporada para el piloto del Marinelli, donde lo único bueno fueron dos victorias que resultaron insuficientes para esclarecer la mala racha y, especialmente, para mantenerse en la lucha por el título.

De este modo, Romano Fenati vio drásticamente reducidas sus posibilidades de coronarse campeón del mundo tras una serie de infortunios y un bajón de rendimiento que le relegó a frecuentar habitualmente las posiciones de la cola del top ten al término de las carreras. En Valencia, última cita del calendario, firmó un cuarto puesto que sirvió para poner la guinda a un pastel que se fue deshaciendo poco a poco.

Fenati en el GP de Cataluña | Foto: Lucas ADSC - VAVEL
Fenati en el GP de Cataluña | Foto: Lucas ADSC - VAVEL

Paciencia, experiencia y agresividad

Tres adjetivos que definen a la perfección el tipo de piloto que es Romano Fenati. Entrenado desde sus inicios para ser el fruto de una semilla que la federación italiana plantó siguiendo el modelo de la española, con el proyecto de Emilio Alzamora como referente, Fenati tiene las aptitudes necesarias para convertirse en campeón del mundo. Quizá sea la constancia lo único que le falla. Sin embargo, y si aún quedaba alguna duda, esta temporada ha dejado más que demostrado que talento no le falta. Después de un final amargo con su antiguo equipo, el SKY Racing Team VR46, con el que pilotaba una KTM, Fenati ha probado no tener ningún problema a la hora de adaptarse a un nuevo prototipo. Por primera vez en los últimos cuatro años del piloto se subió a una Honda y logró llevarla a lo más alto a la estela de uno de los mayores talentos que ha dado el motociclismo español en los últimos tiempos.

Una Honda NSF250RW, monocilíndrica y de cuatro tiempos con una transmisión por cadenas con cambio extraíble modificable en todas sus marchas. Tiene una capacidad de diez litros en el depósito y suspensiones Öhlins, como la gran mayoría de motos en la categoría, que tienen en común también la marca de neumáticos Dunlop. Los frenos delanteros se componen de un doble disco, a diferencia de los traseros que son monodisco. En cuanto al chásis, se compone de una doble viga de aluminio, con llantas en OZ en magnesio forjado.

Fenati en el GP de Cataluña | Foto: Marc González - VAVEL
Fenati en el GP de Cataluña | Foto: Marc González - VAVEL

Su compañero de equipo ha sido Jules Danilo, otro veterano en la categoría que tras cuatro temporadas dará también el salto definitivo a Moto2 de cara a 2018, en las filas del Stop And Go de Edu Perales. El francés se despide de la categoría pequeña del mundial tras completar su segunda mejor temporada de su carrera mundialista, habiendo finalizado en vigesimoprimera posición con un total de 29 puntos, siendo esta campaña también su primera oportunidad real de luchar en posiciones de cabeza. Prueba de ello fue la quinta posición obtenida en Assen, mejor resultado de Danilo hasta la fecha.

La próxima temporada será clave para el piloto italiano, sabedor de que el objetivo principal será hacerse a la nueva moto y a la nueva cilindrada, así como a las características que requiere la elogiada categoría intermedia. Tras un año positivo, aunque con irregularidades, Romano Fenati encarará el próximo curso una de las etapas más importantes de su carrera mundialista donde, siguiendo la línea de la pasada temporada, podría optar a coronarse rookie del año.