Las dos últimas ediciones de las 24 horas de LeMans han sido auténticas pesadillas para el equipo Toyota, todo ello por problemas de fiabilidad, puesto que en el ambito del rendimiento, el equipo Toyota ha mostrado un potencial enorme, siempre mostrándose como el coche mas veloz de la parrilla.
La competencia directa de Toyota estos últimos años han sido Audi y Porsche, equipos que ya no participan en la categoría LMP1, lo que convierte a Toyota en el único equipo oficial de la categoría.
El año pasado, el Toyota número 8 se retiró con un problema en el motor eléctrico, mientras que el número 7 también abandonaba cuando un incidente en el pitlane provocaba un fallo en el embrague.
En 2016, el drama fue absoluto para los japoneses, cuando el Toyota número 7, pilotado por Nakajima, lideraba a falta de 5 minutos para el final, pero el coche se paró por un problema de turbo.
"Creo que la atmósfera es incluso mejor que la del año pasado porque nos enfocamos más en la fiabilidad y menos en el rendimiento", comentaba el director de Toyota a Motorsport. "Nuestro problema es que siempre nos hemos encontrado con ciertas cosas que no esperábamos. Este año hemos trabajado aún más intensamente para evitar eso”.
"El control de calidad ha sido un tema importante para nosotros. Hemos sido muy minuciosos y nos hemos concentrado en la mecánica para asegurarnos de que todo esté resuelto correctamente".
"No podemos permitirnos el lujo de cometer un solo error. El año pasado demostramos que estábamos por delante y aun así no lo logramos. Por supuesto que tenemos que estar mejor preparados. Hemos estado haciendo esto durante siete años. Deberíamos tener todo resuelto".
Toyota es claramente superior al resto, pero para Le Mans, desde la organización se ha trabajado en una fórmula de Equivalencia de Tecnología a medida para asegurarse de que los rivales no híbridos estén a menos de medio segundo por vuelta de Toyota en el Circuito de La Sarthe, por lo que los japoneses contarán con menos potencia híbrida por kilómetro y combustible en comparación con Spa, cree que el objetivo es alcanzable para sus rivales.
"Creo que es realista", dijo Leupen. "Creo que tenemos la carrera en nuestras manos. Hemos visto que Dallara ha construido un automóvil muy rápido. Para nosotros no está claro dónde está el potencial del SMP. Lo mismo con Rebellion”.
"Por momentos en Spa mostraron destellos con una vuelta o sector muy rápido. Están dando pasos más importantes en el desarrollo que nosotros desde Spa hasta aquí", finalizaba Leupen.