Tras los últimos acontecimientos relativos a la invasión rusa en territorio ucraniano la F1 acaba de anunciar el cese inmediato de cualquier evento en dicho territorio cancelando la carrera que debía disputarse inicialmente a finales de septiembre.

Pese a que en un momento Rosgonki, promotor del Gran Premio de Rusia anunció que había alguna posibilidad de que la carrera se disputase ya que por aquél entonces el contrato únicamente había sido suspendido y no cancelado, la F1 acaba de confirmar que rompe el contrato para el Gran Premio de Rusia.

El comunicado reza “la Fórmula 1 puede confirmar que ha rescindido su contrato con el promotor del Gran Premio de Rusia, lo que significa que Rusia no tendrá tampoco carrera en un futuro”.

Significa pues que el Gran Circo no volverá a pisar Sochi ni San Petersburgo, tal y como estaba previsto el 2023, en el renovado trazado de Igora Drive extendiéndose inicialmente el contrato hasta finales de 2025.

Dicha decisión se tomó la pasada semana tras una reunión con los responsables de F1 y los jefes de equipo tras los primeros ataques rusos a Ucrania.

El deporte le da la espalda a Rusia

De esta manera, siguen las consecuencias para el deporte ruso tras el inicio de la invasión, como la prohibición de participar en los Juegos Paralímpicos a deportistas rusos y bielorrusos que tampoco podrán competir bajo bandera neutra, mientras que FIFA suspendió a la selección rusa de fútbol y excluyó a todos los clubes de sus competiciones.

Tras una reunión del Consejo Mundial del Deporte Automovilístico de la FIA celebrada de manera extraordinaria a inicios de semana se anunció que pilotos rusos y bielorrusos podían competir aunque bandera neutral de la FIA, pero distintos países están vetando a los pilotos y equipos rusos y bielorrusos competir en sus países, como el caso del Reino Unido.