La irregularidad sigue condenando a Garbiñe Muguruza. La hispano-venezolana cayó derrotada y no pudo superar la segunda ronda del US Open, su mejor resultado en el major neoyorquino. La letona Anastasija Sevastova fue la responsable de una nueva derrota inesperada de Garbiñe.
No obstante, Garbiñe no quiso hacer más sangre y prefiere mirar hacia el futuro. "Las derrotas siempre son tristes, y claro que me hubiera gustado llegar más lejos, pero tampoco voy a darle muchas más vueltas. Esto no va a pararme", sentenció.
Garbiñe, que reconoció "no estar a su mejor nivel", no quiso quitar "Esta derrota no va a pararme"méritos al gran partido de Sevastova. "Ella jugó muy bien. Le salía todo lo que intentaba. Intenté que no se sintiese tan cómoda, pero me devolvía todo, con algunos tiros increíbles", admitió la vigente campeona de Roland Garros.
Preguntada por aquello en lo que piensa que debe trabajar, la caraqueña dijo "no saber exactamente cuál es el problema". "Tengo que preparar algo mejor los partidos. Tengo esperanza en que lleguen días mejores", añadió.
La "maldición de Roland Garros" sigue siendo tema habitual en cada rueda de prensa de Muguruza, que afirma "no pensar en ello ni un segundo". "Es un torneo nuevo. Siempre quiero llegar lo más lejos posible, y si puede ser, repetir el resultado de Roland Garros".
Aunque no quiso emplearlo como excusa, Garbiñe reflejó su "Había un murmullo constante"incomodidad con el bullicio constante de la pista central de Flushing Meadows. "No ha habido silencio en ningún momento, siempre había murmullo. Pero es así para todas las jugadoras. Es muy difícil que todo el mundo esté callado en una pista tan grande", concluyó.