La polaca Agnieszka Radwanska ha revelado, en una entrevista para Sport360, que estaba "rezando" para que la temporada 2017 terminara después de acabar el año fuera del top20, concrétamente, en la posición 28 del ránking WTA. La exnúmero dos mundial sufrió diversas lesiones y enfermedades durante toda la temporada y no pudo ganar ningún título, cortando una racha de siete años, desde 2010, en el que, al menos, ganaba un torneo por temporada. La polaca se alegra de que 2017 haya quedado atrás y cree que las cosas sólo mejorarán el próximo año.

"Definitivamente, ha sido un año muy difícil. He estado luchando con un par de lesiones y un par de virus también en el camino. Fue realmente difícil no poder prepararme de cara a los Grand Slams. Solo estaba rezando para que este año terminara y poder comenzar con ganas el año que viene. Veremos cómo me va, pero seguro que no podrá ser peor que este año", comentó una Agnieszka Radwanska que, el año que viene, comenzará la temporada en el ASB Classic en Auckland, antes de ir a la siguiente semana al WTA de Sidney. Estos dos torneos le servirán de preparación para encarar el primer Grand Slam del año.

Después de hacer al menos una semifinal de Grand Slam en cada una de las cinco temporadas consecutivas entre 2012 y 2016, Radwanska no pudo superar la cuarta ronda en cada uno de los majors este año. Tampoco pudo clasificarse para las WTA Finals por primera vez desde 2010 y terminó teniendo unas vacaciones más largas de lo normal, debido a que acabó su temporada antes de lo habitual. Eso la inspiró a ella y a su equipo a cambiar su pretemporada y decidieron, por primera vez, ir a Dubai a entrenar y prepararse para 2018. Allí, en una de las principales ciudades de los Emiratos, realizó ejercicios en la playa.

"Es algo diferente y es muy bueno hacer algo nuevo. Obviamente, durante tantos años en la gira has estado practicando las mismas cosas una y otra vez, por lo que correr en la playa es algo nuevo". También aseguró que se siente en forma y tiene la esperanza de que sus problemas de lesiones se hayan quedado atrás. "Físicamente estoy bien hasta ahora, mi pie está mucho mejor que antes. He estado trabajando en eso durante mucho tiempo y realmente espero que sea mucho mejor el próximo año", aseguró la número uno polaca.

Ella insiste en que sus objetivos siguen siendo los mismos, aunque continúa persiguiendo ese tan ansiado primer Grand Slam que se le resiste aunque, debido al ránking que tiene ahora, el año que viene lo tendrá un poco más complicado. "Es algo nuevo, pero bueno, así es como es, especialmente con tantas cosas que han sucedido este año", dijo refiriéndose a su posición en el ránking. "Debo decir que hay muchas jugadoras que están jugando a un nivel realmente alto en este momento y muchas jugadoras prometedoras también juegan un gran tenis, así que ha sido realmente difícil. Cada año es cada vez más difícil y tendré que trabajar más duro para volver a los puestos de arriba de la clasificación", concluyó la "maga" Aga Radwanska.